Según informó el Ministerio, con la publicación del texto se ha iniciado el trámite de audiencia pública en el que se recabará la opinión de ciudadanos, organizaciones y autoridades interesados en esta materia. El texto estará en audiencia pública hasta el próximo 7 de septiembre.

El Ministerio explicó que esta iniciativa responde a la “convicción” de que la transformación digital de la economía es un fenómeno de cambio estructural que exige una implicación activa de los poderes públicos garantizando que los cambios se producen “de manera ordenada y coherente” con los principios y valores que definen el interés general. La iniciativa responde también a las recomendaciones de diversas instituciones y foros internacionales.

La nueva regulación pretende favorecer el proceso innovador eliminando obstáculos y articulando cauces “ágiles” y “transparentes” de colaboración entre las autoridades públicas y la iniciativa privada como motor principal de la innovación. Al mismo tiempo, se preservan los principios configuradores de la política financiera, asegurando que la transformación digital no afecta al nivel de protección a la clientela de servicios financieros, a la estabilidad financiera y a la integridad en los mercados, ni facilita de ningún modo la utilización del sistema financiero para fines ilícitos.

Respecto a la principal de las medidas contempladas en el anteproyecto, el ‘sandbox’ o espacio controlado de pruebas, se prevé que las pruebas se realicen bajo tres condiciones: vigilancia de las autoridades competentes, en particular los supervisores financieros; delimitación previa del alcance, duración y características de las pruebas; y máxima garantía para los participantes cuando la realización de las pruebas requiere la participación de clientes reales.