El Banco de España atribuye el 70% de la caída del PIB entre abril y diciembre a las restricciones antiCovid

El Banco de España atribuye aproximadamente el 70% de la caída del Producto Interior Bruto (PIB) registrada entre abril y diciembre a las restricciones a la movilidad que se implantaron desde el Gobierno español y los ejecutivos autonómicos para frenar los contagios de coronavirus.

Así lo señala en un documento, publicado este jueves, en el que analiza la relación entre las medidas de contención de la pandemia, la movilidad y la actividad económica.

La institución explica que ha excluido el mes de marzo del periodo mencionado (abril-diciembre) debido a que las medidas que se establecieron para frenar los contagios sólo se aplicaron durante una quincena, en concreto, desde la declaración del estado de alarma.

El Banco de España afirma en este informe que durante los primeros meses de la pandemia, la actividad se contrajo «más intensamente de lo que sugeriría» la reducción observada en la movilidad de la población, un fenómeno que dejó de observarse prácticamente a partir del mes de agosto y que cambió incluso de signo al final del año.

En su opinión, esto podría sugerir la existencia de un «cierto proceso de aprendizaje» por parte de los agentes económicos a la hora de convivir con la pandemia.

«Este aprendizaje podría estar relacionado, entre otros aspectos, con una implantación cada vez más efectiva de nuevas formas de trabajo, en particular, el teletrabajo, y nuevos patrones de consumo, con un mayor sesgo hacia el consumo en línea», apunta.

En todo caso, estima que las restricciones legales tuvieron un fuerte impacto sobre la movilidad de la población y la actividad económica. Además, apunta que, de forma voluntaria, los ciudadanos redujeron su movilidad en el segundo trimestre de 2020 más allá de lo explicado por las restricciones establecidas, efecto que perdió fuerza con la desescalada.

«En las fases iniciales de la pandemia, la reducción de la movilidad fue superior a la que se desprendería de las restricciones aprobadas. Esto es, al principio se produjo, aparentemente, una cierta reducción de la movilidad de carácter voluntario. Sin embargo, tras la desescalada, el comportamiento de la movilidad se ha ajustado más al explicado por las medidas de contención en vigor», subraya.

La institución afirma que el impacto adverso sobre el PIB como consecuencia de las restricciones puede verse contrarrestado a medio plazo «por un efecto de signo opuesto», en la medida en que las restricciones impuestas actualmente sirvan para evitar otras más contundentes en el futuro.