El Banco de España confirma la «relajación» de los criterios para conceder hipotecas en el segundo trimestre

El Banco de España apunta que los criterios de aprobación de los créditos a los hogares para adquisición de vivienda “volvieron a relajarse en cierta medida durante el segundo trimestre de 2018”.

Los factores que habrían contribuido a esta evolución, añadió, fueron “el aumento de la competencia, las mejores perspectivas económicas generales y en el mercado de la vivienda, y la mayor solvencia percibida de los prestatarios”.

Por su parte, las condiciones generales aplicadas en estos préstamos “también se suavizaron de nuevo, debido fundamentalmente al aumento de las presiones competitivas y a los menores riesgos percibidos”.

El Banco de España señala que en el segundo trimestre del año los criterios de aprobación de préstamos “se relajaron ligeramente” en todos los segmentos, algo que se ha detectado tanto en España como en el conjunto de la UEM.

“Las condiciones generales aplicadas a los créditos se suavizaron también de forma generalizada en ambas áreas, aunque con mayor intensidad en España, especialmente en el caso de la financiación a las familias para consumo y otros fines y en el de los préstamos a empresas”, explica en Banco de España.

Así lo recoge el supervisor en un artículo analítico sobre la Encuesta de Préstamos Bancarios publicado este martes, en el que se añade que para el trimestre en curso, tanto las entidades españolas como las de la UEM “preveían que los criterios de concesión de créditos continuarían relajándose ligeramente en todas las modalidades”.

De acuerdo con las respuestas recibidas en la encuesta, en el segundo trimestre de 2018 la demanda de préstamos habría crecido en los dos segmentos de hogares, tanto en España como en la UEM, siendo el ascenso “significativamente más intenso en España en el caso de los fondos destinados a consumo y otros fines distintos de la adquisición de vivienda”.

En cambio, en los créditos a empresas las solicitudes habrían aumentado en la eurozona y se habrían mantenido estables en España.

Para el tercer trimestre del año, las entidades participantes en la encuesta preveían que las peticiones de fondos “aumentarían de forma generalizada en ambas áreas”.