El Banco de España prevé un déficit del 2%

El Banco de España estima que de aprobarse el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2019 el déficit público de este ejercicio se situaría en el 2%, por debajo del 2,7% de 2018 y cuatro décimas menos respecto a su anterior previsión (2,4%), realizada en diciembre antes de conocerse el proyecto de cuentas públicas.

Así lo señaló el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, durante su comparecencia en la Comisión de Presupuestos del Congreso de los Diputados para analizar el proyecto presupuestario, en la que aseguró que la reducción prevista de 1,4 puntos en el déficit para rebajarlo del 2,7% de 2018 al objetivo del 1,3% de 2019 es «claramente superior» al esperado por los analistas. Por ello, aseguró que el mayor esfuerzo fiscal para la corrección del déficit y el cumplimiento del objetivo podría hacer revisar a la baja la previsión de crecimiento del PIB, que en principio sitúa en el 2,2%.

Cabe recordar que el objetivo de déficit del 1,3% fue fijado por el anterior Gobierno del PP y que el actual Ejecutivo socialista intentó modificar, sin éxito, la senda de déficit para ampliar dicho objetivo hasta el 1,8%, teniendo en cuenta que 2018 se cerró en el 2,7%, por encima del objetivo del 2,3%.

En cualquier caso, al valorar el proyecto presupuestario, Hernández de Cos también indicó que, aunqque el impacto de las medidas de ingresos y gastos del proyecto de PGE situaría el déficit en el 2%, frente a su anterior previsión del 2,4%, al mismo tiempo las medidas impositivas contempladas en el proyecto podría también hacer revisar “ligeramente a la baja” la previsión de crecimiento del PIB.

RIESGOS

Así, aunque el gobernador del Banco de España afirmó que el cuadro macroeconómico incorporado en el proyecto de cuentas públicas es “coherente” con las previsiones del Banco de España, al mismo tiempo señaló riesgos a la baja en las estimaciones de ingresos públicos. En este sentido, advirtió que, al contrario de lo manifestado por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, los ingresos de un mes extra por la introducción del Sistema Inmediato de Información (SII) del IVA no pueden trasladarse a la Contabilidad Nacional y, por tanto, darían lugar a un mayor déficit del previsto por el Gobierno.

Asimismo, el Banco de España también considera que “aunque siempre existe una cierta incertidumbre sobre la respuesta de los ingresos públicos a las bases impositivas, las previsiones de los PGE parecen incorporar unas elasticidades superiores a las medias históricas”, en referencia a que algunas previsiones de ingresos podrían ser demasiado altas. Así, el Banco de España espera que la recaudación agregada por impuestos compartidos y cotizaciones sociales efectivas aumentaría un 5,6% en 2019, frente al incremento previsto por los PGE del 6,9%, diferencia que se explica por una menor previsión para las cotizaciones sociales por parte del Banco de España.

En la misma línea, Hernández de Cos advirtió que “la estimacion de los impactos recaudatorios de las nuevas figuras tributarias está sujeta a un elevado grado de incertidumbre” y que “se debe mostrar cautela en relación con el potencial retraso en la entrada en vigor de las medias que acompañan al proyecto de PGE”. Por ello, afirmó que “un menor impacto recaudatorio de las nuevas figuras tributarias frente al oficialmente estimado, un retraso en la entrada en vigor de las medidas impositivas incluidas en los Presupuestos o una potencial materialización de los riesgos a la baja de las perspectivas de crecimiento de la economía eleveraían al alza la proyeccion de deficit”.

En cuanto al empleo, el Banco de España estima que el crecimiento del número de ocupados se situaría en torno al1,6% anual en 2019, reduciendo la tasa de paro hasta el entorno del 14% a finales de 2019, aunque también considera que el incremento en un 22% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ralentizará la creación de empleo.

Por otro lado, el gobernador aseguró que la desaceleración en el crecimiento de España, pasando del 2,5% en 2018 a un 2,2% en 2019, “responde en gran medida al contexto internacioanl más débil”, marcado por las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, a la incertidumbre por el Brexit y cierto endurecimiento de las condiciones financieras globales.