El informe difundido por Crédito y Caución identifica los sectores y mercados más afectados por el voto de salida.
Tras semanas de especulaciones, el curso futuro de las relaciones entre Reino Unido y la Unión Europea se clarifica. Con una participación del 72%, la decisión de abandonar la Unión Europea ha sido confirmada por una mayoría del 51,9%. Aunque se trata de una decisión de suma importancia, en términos prácticos pocas cosas cambiarán en el futuro inmediato. No obstante, Reino Unido y otros Estados miembros sentirán las consecuencias de forma inevitable.
Para Reino Unido es inevitable un periodo de incertidumbre con el foco puesto en la estabilidad política a la luz del anuncio del Primer Ministro, David Cameron, que renunciará a su cargo antes del fin de 2016.
Tras el anuncio del Brexit, Crédito y Caución ha difundido un nuevo informe económico que identifica los sectores clave que previsiblemente se verán afectados por el voto de salida y anticipa un posible incremento de las insolvencias a corto plazo en mercados como Irlanda, Países Bajos o Bélgica debido a los estrechos lazos comerciales y de inversión. No obstante, el informe prevé que los efectos apenas se dejarán sentir en la mayoría de los demás países europeos.
Para Reino Unido, anticipándose al voto de salida, algunos efectos ya se han dejado sentir con la depreciación de la libra esterlina y la ralentización de las inversiones en las empresas y el personal. Tras la decisión del Brexit, las previsiones recogidas en el informe apuntan a que el PIB de Reino Unido se reducirá entre un 1% y un 3% en los próximos dos años. La estructuración de acuerdos comerciales en los próximos dos años determinará el impacto a largo plazo.
Los efectos también se dejará sentir, por ejemplo, en la inversión directa extranjera de Países Bajos o en el comercio exterior de Irlanda y Noruega. Además, se espera que los países del Benelux e Irlanda registren aumentos en sus niveles de insolvencia de entre el 1% y el 3,5%. El cambio en las insolvencias en otros países europeos será poco significativo.
«En Reino Unido la economía ha mantenido un crecimiento más moderado del 0,4% en el primer trimestre. Sin embargo, el voto de salida ha tenido un impacto inmediato en el tipo de cambio frente a todas las monedas principales. Aunque los tratados comerciales deberán ser abordados, a corto plazo se mantendrá el comercio internacional, beneficiándose de un menor tipo de cambio», afirmó Andreas Tesch, Chief Markets Officer de Atradius.
«No habrá ningún impacto a corto plazo en nuestra postura de suscripción para el mercado británico. Más allá de las emociones por el resultado, es importante reconocer que las compañías británicas se adaptarán y aquellas con una gestión sólida, con una estrategia clara y bien financiada, seguirán prosperando. Reino Unido sigue estando abierto a los negocios y nosotros también. Las empresas que optan por el seguro de crédito reconocen que una sólida estrategia de gestión de riesgos permite el comercio y nosotros seguimos confiando en que podemos ayudar a nuestros clientes a crecer en sus negocios, en el mercado nacional, en Europa y en otros mercados en todo el mundo», afirmó el director de Atradius en Reino Unido e Irlanda, Alun Sweeney.