Garrido explicó que se trata de una ayuda para las familias que realmente lo necesitan, con una estimación inicial de 1.500 beneficiarios el primer año y 3.000 el siguiente, ya que la medida se va a implantar de manera progresiva.

Señaló que el curso que viene (2019-2020) beneficiará a los alumnos de 1º de Bachillerato y en el curso 2020-2021 la medida estará implantada en toda esta etapa postobligatoria.

Para su concesión, el Gobierno regional establecerá unos baremos de renta con el fin de que lleguen a los alumnos que más lo necesitan y de esa manera asegurar la libertad de elección educativa.

Garrido, que hizo estas declaraciones tras visitar el colegio concertado Nazaret Oporto de Madrid, uno de los centros madrileños que cuenta con Bachillerato y que destaca por tener una amplia diversidad cultural gracias a las más de 20 nacionalidades de sus alumnos, manifestó que esta ayuda se une a otras ya existentes en la región y que constituyen otro de los principios fundamentales de la acción del Gobierno regional en materia educativa: la igualdad de oportunidades.

RECORD HISTÓRICO EN BECAS

El presidente dijo que para la puesta en marcha de esta iniciativa, el Gobierno destinará una partida de 3,2 millones de euros en los Presupuestos del año 2019, cantidad que corresponde al primer cuatrimestre del curso 2019-2020.

Los Cheques-Bachillerato suponen un nuevo impulso para la libre elección de educación por parte de las familias, uno de los pilares fundamentales del sistema educativo de la Comunidad, indicó el Gobierno regional. De hecho, en el actual curso el 93,6% de las familias ha obtenido plaza en el centro educativo elegido.

En el curso 2018-19 la partida destinada a becas y ayudas a las familias madrileñas ha aumentado 18 millones de euros, un 16,3%, lo que ha permitido que el presupuesto pase de los 110 a los 128 millones de euros, lo que supone una cifra récord en la región.

Indicó que entre las principales becas del Gobierno regional están las destinadas al Programa Accede, el sistema de préstamo de los libros de texto y material curricular a los alumnos, las becas de Segunda Oportunidad (para que aquellos jóvenes que quieran retomar su formación tras abandonar los estudios puedan hacerlo), los cheques de Educación Infantil para escuelas infantiles privadas, o el presupuesto destinado a comedores escolares, entre otras.

Por otra parte, señaló que el Ejecutivo regional continúa trabajando en el borrador de decreto que actualice y mejore la normativa de la escuela concertada en la Comunidad de Madrid y amplíe su normativa básica autonómica.

Garrido manifestó que el Gobierno regional ha trabajado esta iniciativa con representantes del sector de la enseñanza concertada madrileña.

Se trata de la primera vez que la región prepara un decreto que regula el ordenamiento de los conciertos, mediante el cual se quiere reconocer la tarea que estos centros llevan desarrollando desde hace más de 30 años.

La educación concertada en la Comunidad de Madrid cuenta este curso escolar con unos 365.000 alumnos, que se distribuyen en un total de 557 centros escolares en todas las etapas educativas.

Según el Ejecutivo autonómico, se trata de un texto que responde a la necesidad de que la Comunidad de Madrid disponga de su propia norma reglamentaria, siempre dentro del límite de las competencias atribuidas a las comunidades autónomas por la Ley Orgánica de Educación y desde la experiencia conjunta adquirida con los más de 500 centros privados concertados en la Comunidad de Madrid.