Las ventas por Internet del comercio minorista aportaron alrededor de 8.500 millones de euros a la economía española en 2022 y dieron empleo a alrededor de 283.000 personas de forma directa e indirecta ese mismo año, según los datos del informe sobre el ‘Impacto del comercio electrónico en el pequeño comercio y en la economía española’, elaborado por la consultora económica Nera para Amazon y presentado este miércoles en el marco del Observatorio del Comercio Electrónico, en la sede de Adigital.
A pesar del auge del comercio electrónico en España en los últimos años, las ventas del canal digital representaron el 7% del total de los ingresos del sector minorista en el año 2022.
En concreto, estas ventas superaron los 20.659 millones de euros ese mismo año, un crecimiento interanual acumulado del 26% desde el año 2014.
EL COMERCIO ELECTRÓNICO: IMPULSO PARA LAS VENTAS DE PEQUEÑOS COMERCIOS
El crecimiento del comercio electrónico ha demostrado ser una oportunidad para las pequeñas tiendas de España –todas ellas pymes– ofreciéndoles un canal adicional de venta.
En este contexto, los datos del informe reflejan que el 5% de las ventas de los pequeños comercios en 2022 se produjeron a través de Internet, una cifra solo situada dos puntos porcentuales por debajo de la media total de las empresas en España.
Muchas de estas pymes son pequeños comercios y tiendas tradicionales que han adoptado una estrategia multicanal, ya sea creando su propia tienda ‘online’ sin la necesidad de hacer una gran inversión, vendiendo a través de ‘marketplaces’ o en ambos canales.
El análisis de Nera demuestra que el crecimiento del comercio electrónico ofrece una vía de crecimiento adicional a estas pequeñas empresas sin generar un impacto negativo en las ventas de los pequeños comercios.
De hecho, el informe revela que el 65% de los pequeños y medianos comercios españoles que venden ‘online’ han visto cómo las ventas de su tienda física se mantenían e incluso aumentaban.
Otra de las mayores ventajas que ofrece el comercio electrónico a los pequeños comercios y a las tiendas es la posibilidad de vender más allá de su ciudad e internacionalmente, independientemente de su tamaño.
Según el informe, el 28% de las ventas por comercio electrónico de los establecimientos españoles corresponden a ventas internacionales.
En el caso concreto de Amazon, las 15.000 pymes españolas que venden actualmente en su tienda batieron récord en 2022 con 950 millones de euros en exportaciones, un 10% más que en el año anterior.
«La mejor forma de digitalizar la pyme y potenciar su competitividad internacional es mediante el comercio electrónico. Desde el Observatorio de Comercio Electrónico de Adigital, y junto con nuestras empresas asociadas, estamos comprometidos con impulsar el crecimiento de la pyme española a través de la digitalización de su canal de ventas, y convertir a España en el ‘hub’ líder en ‘e-commerce’ en el Sur de Europa», ha afirmado el director general de Adigital, César Tello.
APOYO AL ENTORNO RURAL
La expansión del comercio electrónico también ha contribuido a que los habitantes de zonas rurales puedan disfrutar de las mismas opciones de compra que los residentes de zonas urbanas y más densamente pobladas, cerrando la brecha entre campo y ciudad. Ambos siguen un patrón de compra muy similar tanto en frecuencia, como en importe y en el tipo de productos que se compran.
Asimismo, el comercio electrónico contribuye al desarrollo económico y social del medio rural ofreciendo a los comercios locales la oportunidad de vender sus productos más allá de su municipio o de repartir los pedidos de sus vecinos, generándoles un ingreso adicional.
Cerca de 5.000 pequeñas y medianas empresas localizadas en zonas rurales venden sus productos a través de la tienda de Amazon, las cuales alcanzaron más de 300 millones de euros en ventas internacionales en 2022, lo que supone un crecimiento acumulado anual del 30% en los últimos cinco años.
A través de iniciativas como Amazon Hub Delivery, la red de colaboradores de entrega vecinal de Amazon, la compañía contribuye al desarrollo económico y social de la España rural ofreciendo a los propietarios de los comercios locales la oportunidad de repartir los pedidos de Amazon, garantizando una entrega más rápida y sostenible, y generando nuevas vías de ingreso para estos. El programa, que se lanzó en España en agosto de 2020, ya cuenta con 1.000 colaboradores de reparto en el país.