El consumo no se recupera y continúa marcando tasas negativas

El IPC sube dos décimas en febrero por la subida de precios de la gasolina 

El crecimiento del empleo no termina de traducirse en el consumo. El IPC correspondiente al mes de febrero continúa marcando tasas negativas y a pesar del crecimiento de dos décimas con respecto a enero, la tasa anual continúa en el -1,1 por ciento.

Además, lejos de impactar en la economía real, el aumento de los precios se debió al efecto gasolina. El transporte presentó una variación del -5,6 por ciento, más de dos puntos por encima de la relativa al mes de enero, convirtiéndose en el epígrafe con mayor peso en el cuadro de evolución de la tasa anual.

La mejora de la economía también es aprovechada por las grandes cadenas de supermercados y marcas de alimentación y bebidas. Comer nos costó en febrero seis décimas más que en enero; en tasa anual el IPC de alimentos y bebidas alcanzó el 0,2 por ciento en positivo. Las medicinas también subieron, en concreto un 0,1 por ciento.

Desconectar nos supuso algo más de esfuerzo, tanto el ocio y la cultura como la estancia en hoteles, cafés y restaurantes subieron un 0,4 y un 0,2 por ciento respectivamente.

En la parte baja de la tabla la vivienda se desplomó un 1,3 por ciento debido al menor importe de la factura eléctrica y las rebajas de enero se han traducido en un -1,7 por ciento en el precio de ropa y calzado.