La economía española creció entre enero y marzo un 0,4%, dos décimas más que en el anterior trimestre. Es uno de los datos positivos del Viejo Continente ya que nuestros vecinos franceses o italianos registraron tasas comparadas negativas.
Por el contrario, Alemania vuelve un trimestre más a imponerse como locomotora de Europa de la mano de Reino Unido o Dinamarca. Sin embargo, si sumamos los datos de los Veintiocho el total es que el Viejo Continente ralentizó su crecimiento. En concreto, según Eurostat, el producto interior bruto de la eurozona creció sólo un 0,2% entre enero y marzo de 2014, una décima menos que la registrada el último trimestre del año pasado.
Mejor lectura podremos hacer del segundo trimestre. Al menos eso es lo que avanza el PMI manufacturero del mes de mayo. Según Markit, este índice se situó en los 53,5 puntos, lo que supone su undécimo mes de crecimiento.Y lo que es más importante, la economía de la zona euro va en camino de registrar el mejor trimestre en tres años gracias a la recuperación mantenida de Alemania, Italia y España, que contrarrestan la debilidad de Francia.
Tan solo un “pero”: el carácter moderado de la creación de empleo sigue reflejándose en otros hechos como que la demanda interna sigue sin despegar.