Las trabas con las que se encuentran son la petición de avales y garantías por parte de los bancos
Esta mañana el Ministerio de Empleo y Seguridad Social ha dado a conocer los datos de paro relativos al mes de noviembre. Unas cifras muy positivas ya que ha caído en 27.071 personas, pero podría ser mejor si el acceso a la financiación por parte de las pymes fuese más sencillo.
Según refleja el I Informe sobre situación de las pymes en relación con la financiación ajena, elaborado por SGR-Cesgar, la dificultad que tienen las empresas de menor tamaño de acceder a la financiación bancaria les impide “crear más de medio millón de puestos de trabajo”, explicó José Ronaldo Álvarez, presidente de la Confederación Española de Sociedades de Garantía Recíprocas (SGR-Cesgar). Y es que son cerca de 200.000 las pequeñas y medianas empresas españolas que no recibieron préstamo alguno en los últimos seis meses. Pero no sólo ha lastrado la creación de empleo, sino también el avance económico, razón por la que “España está creciendo con una bola de hormigón atada al cuello”, manifiesta.
Y es que la falta de financiación impide el crecimiento de estas sociedades. La empresa tipo española se caracteriza por ser mayoritariamente pymes del sector servicios (el 75 por ciento del total) con menos de 10 trabajadores y que facturan menos de 300.000 euros al año.
Es una situación paradójica ya que a pesar de ser las que mejor han resistido a la crisis solo el siete por ciento exportan sus productos a otros países y un 21,6 por ciento se catalogan como innovadoras. Son, como insiste Álvarez, “el milagro económico español”.
La falta de capital imposibilita la creación de nuevos proyectos. Según resalta el informe, el 98,8 por ciento de los planes no se llevaron a cabo al no contar con el presupuesto suficiente y al 71,1 por ciento de ellos les denegaron la financiación por no presentar unas cuentas adecuadas. La causa es sencilla, “el sistema financiero está subiendo los requerimientos”, como son por ejemplo disponer de avales o garantías, elementos con los que no suelen contar las empresas de menor tamaño o por lo que tienen que arriesgar un bien personal.
El por qué las pymes no accedieron a la financiación recae el cuatro asuntos: el 15,4 por ciento no llegaron a solicitarla, al seis por ciento se la han denegado, el 3,7 por ciento continúa a la espera de una respuesta y un 1,3 por ciento porque las condiciones planteadas no eran las adecuadas.
Los bancos continúan liderando la búsqueda de capital
“Las pymes tienen un difícil acceso a la financiación”, explica Álvarez, porque los bancos siguen liderando la prestación del capital. La principal razón por la que estas empresas recurrieron a entidades bancarias fue para financiar el circulante. De hecho, lo hicieron el 71 por ciento de las pymes, una cifra que se eleva hasta el 84,4 por ciento en un ámbito más general.
Cada vez hay más alternativas a la captación de dinero, una de ellas son las Sociedades de Garantía Recíprocas (SGR) pero a las que recurren solo una de cada 10 empresas. Asimismo, el 82,6 por ciento de las pymes nunca han recurrido a una SGR ni conocen bien qué servicios ofrecen.
Son sociedades sin ánimo de lucro con un enorme potencial de crecimiento motivado por un papel estratégico en la financiación de empresas de menor tamaño, autónomos y emprendedores.
Las ventajas que ofrecen son múltiples: la facilidad para acceder a la financiación bancaria, la obtención del asesoramiento financiero adecuado y la posibilidad de obtener mayores importes.
El presidente de SGR-Cesgar explica que las entidades financieras prestan una cantidad determinada de dinero a las pymes para devolver en un periodo de dos o tres años. Esto es algo imposible de llevar a cabo, según José Ronaldo Álvarez, cuando estas empresas facturan al año menos de 300.000 euros. Por eso propone otra solución que pasa por ofrecer un préstamo de 90.000 euros a devolver en ocho años, un periodo de tiempo lo suficientemente prolongado para poder devolver toda la cantidad prestada.
Su crecimiento ha sido continuo, y espera seguir haciéndolo en los próximos años. Su objetivo es hacerlo un 50 por ciento entre 2015 y 2016 para llegar a más pymes porque, como afirma Álvarez, “tenemos capital y solvencia” para prestarles el dinero.
Yasmina Pena