La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, ha pedido a los países del G20 y a otras economías desarrolladas que adopten «acciones urgentes» para evitar que siga creciendo la recuperación a dos velocidades que está sucediendo tras la crisis generada por la pandemia.
«El mundo se enfrenta a un empeoramiento de la recuperación a dos velocidades, provocado por las dramáticas diferencias en la disponibilidad de vacunas, las tasas de infección y la capacidad de proporcionar estímulos. Es un momento crítico que necesita aciones urgentes por el G20 y los políticos de todo el mundo», ha subrayado Georgieva en el blog del FMI.
La directora gerente ha explicado que los datos más recientes disponibles apuntan a una recuperación que progresa en línea con las estimaciones del FMI. «Tras una crisis sin igual, estamos viendo en algunos países una recuperación sin igual», ha apostillado.
No obstante, los datos también confirman que la divergencia económica entre economías se está haciendo más profunda, por lo que muchos países se están quedando atrás. Según los cálculos del Fondo, la pandemia ha provocado que 95 millones de personas de todo el mundo caigan en situación de extrema pobreza.
Con el objetivo de que la recuperación sea menos desigual, Georgieva ha pedido al G20 que se comprometa a que al menos el 40% de la población de todos los países del mundo esté vacunada para finales de 2021, así como que el porcentaje suba al 60% en 2022. Un acceso más rápido a vacunas de la población en riesgo podría salvar hasta medio millón de vidas hasta final de año, según ha calculado el Fondo.
INFLACIÓN EN EEUU
Por otro lado, Georgieva también ha señalado que el posible repunte en la inflación en Estados Unidos supone un riesgo para la recuperación a nivel mundial.
Una recuperación acelerada en Estados Unidos «beneficiará a muchos países gracias al mayor comercio», ha explicado la directora gerente. No obstante, si los precios suben de manera más sostenida, esto podría provocar un endurecimiento de la política monetaria de Estados Unidos antes de lo previsto. Dado el papel central del país norteamericano en la economía mundial, un incremento en los tipos de interés podría provocar un «rápido endurecimiento2 de las condiciones financieras a nivel global y salidas de capital «significativas» en países emergentes y en desarrollo.
«Asegurar la recuperación requiere de una continua acomodación monetaria en la mayoría de países. Esto tiene que ir acompañado de una vigilancia cercana a la inflación y a los riesgos de estabilidad financiera. En los países en los que la recuperación se está acelerando, incluyendo Estados Unidos, será esencial evitar una sobrerreacción a incrementos transitorios en la inflación», ha advertido Georgieva.