El producto interior bruto (PIB) de Alemania, la mayor economía de Europa, crecerá este año un 3,6%, lo que supone una revisión a la baja de las expectativas de expansión para la ‘locomotora europea’ como consecuencia del impacto de la pandemia, según ha anunciado el ministro de Economía y Cambio Climático, Robert Habeck.

De este modo, el nuevo Gobierno alemán ha revisado a la baja en medio punto porcentual la anterior estimación de crecimiento del PIB para 2022. En 2021, la economía de Alemania creció un 2,7%.

«Las consecuencias de la pandemia de coronavirus todavía se sienten y las empresas están luchando contra ellas. Sin embargo, nuestra economía sigue siendo sólida», ha afirmado Habeck.

Asimismo, a pesar de la rebaja en la previsión de crecimiento, el ministro germano ha subrayado que las perspectivas para el mercado laboral «también parecen muy buenas», apuntando que la tasa de paro se reducirá este año en seis décimas, hasta el 5,1%, mientras que el número de ocupados crecerá en 425.000 personas.

«Ahora tenemos que establecer el rumbo correcto para salir de la crisis rápidamente», ha destacado Habeck, para quien seguir garantizando la prosperidad y la competitividad implica que la recuperación económica vaya de la mano de la lucha contra el cambio climático y un progreso sostenible.

«Esta transformación es un desafío histórico, pero también una gran oportunidad. A partir de este año, desarrollaremos gradualmente la economía social de mercado en el sentido de una economía de mercado socioecológica», ha apostillado.