Lo hizo en rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reuniera con los portavoces en el Congreso de ambos partidos, Gabriel Rufián y Aitor Esteban, respectivamente.

En general, Montero insistió en el empeño manifestado por el Gobierno de contar con “el concurso de todos” porque los de 2021 serán “unos Presupuestos inéditos para un momento inédito”, el de la pandemia de coronavirus y la consiguiente crisis económica, y por eso Sánchez reclama a todos que “aparquen las diferencias ideológicas e intereses partidistas” y opten por “buscar aquello que nos une”.

De esa forma, rehusó la tesitura que planteó en su rueda de prensa Rufián, y que también delimita Unidas Podemos, de elegir entre pactar las cuentas con Ciudadanos y hacerlo con los grupos que apoyaron la investidura.

“No podemos homologar cómo se han hecho otros Presupuestos, hay que abandonar ese marco mental que probablemente sí ha sido válido en los años anteriores y lo será en los posteriores”, insistió, para “no desaprovechar el esfuerzo” con el que se negoció en Bruselas.

«PRESUPUESTOS NO AUTOEXCLUYENTES»

“No se trata de elegir en términos clásicos, cómo se aborda con una formación u otra”. Así, reiteró su “llamamiento general a todas las fuerzas políticas” porque “cuantos más mejor” y propuso “unos Presupuestos progresistas pero no autoexcluyentes”, con los que “trascender los esquemas clásicos”. “Este Gobierno no va a elegir excluyendo a uno para elegir a otro”, reiteró, sino que lo hará “pidiendo generosidad al resto de partidos para que no se produzcan vetos cruzados”.

Como ejemplo, citó las reuniones de ayer de Sánchez con los presidentes del PP y Ciudadanos, Pablo Casado e Inés Arrimadas, y el contraste que revelaron entre “aquéllos que quieren construir de quienes no tienen otro afán que destruir, desgastar, hacer de la política inutilidad”. Un nuevo elogio a Cs que fue muy sintomático después de que Rufián volviera a remarcar la incompatibilidad de ERC con esa formación, y revela cuál es el socio más factible que vislumbra el Gobierno para pactar los Presupuestos.

No obstante, a ERC, además de aceptando su reivindicación de reunir a mediados de mes la mesa de diálogo entre el Gobierno español y el catalán, le tentó apuntando que, con los fondos europeos que requieren una aprobación de las cuentas, “tenemos un volumen importante (de dinero) para desarrollar políticas progresistas”, y recordó que “ERC se define, además de como independentista, como partido progresista, de izquierdas”, de forma que esas políticas que pretende aplicar el Gobierno “están en sintonía, están en la onda de lo que pide ERC”.

Respecto a la reunión de Sánchez con Esteban, a la que casi olvidó referirse, tal vez porque acababa de terminar y no tenía detalles de la misma, Montero ensalzó que el PNV “facilita siempre que podamos desarrollar las políticas que tenemos comprometidas en el acuerdo estable al que llegamos en la investidura” y, dentro de su “marco ideológico” y sus prioridades, “siempre intenta contribuir, ser útil” a los ciudadanos, “no obstruir y dar continuidad a las iniciativas del Gobierno” Una actitud, reconoció, que “facilita mucho un acuerdo».