El director de la Oficina Económica del presidente del Gobierno, Álvaro Nadal, ha advertido de que subir fuertemente los salarios y los precios como se hacía en el pasado sólo puede conducir a un paro del 24%. «Es una de las lecciones más importante de la crisis, que no necesariamente se pierde por ser moderado y disciplinado», ha dicho Nadal en el Foro Aragonex, tras recordar además que los salarios y las pensiones ganarán poder adquisitivo por la baja inflación.
En este sentido, ha recordado que los precios está ahora en el -0,2% y que los salarios se mueven más o menos alrededor del 0%, mientras que las pensiones subirán 0,25% el año que viene, lo implica ganancias de poder adquisitivo. Además, ha rechazado los debates sobre quien ha ajustado los salarios y quien no porque el esfuerzo ha sido «general» y se ha hecho en casi todos los sectores de la economía, también en el público, donde se ha intentado que fuera «lo más equilibrado posible».
Así, ha criticado a aquellos que piden que se derogue la reforma laboral porque gracias este cambio y al primer paso que dieron los agentes sociales al firmar un acuerdo ahora hay negociaciones colectivas «más sensatas». A su parecer, el primer objetivo de esta reforma era cambiar el patrón de ajuste del mercado laboral, que tiene que producirse a través de cualquier cosa menos del desempleo, como ha ocurrido hasta ahora. «Y se ha logrado», ha dicho.
Durante su intervención, Nadal ha repasado la situación de la economía y ha asegurado que ahora España es un «ejemplo» a nivel internacional porque ha hecho todo lo que tenía que hacer y ha descubierto un camino que le lleva a progresar. «¿Cómo se consigue esto? Despacito y con buena letra», ha dicho, tras asegurar que para lograrlo España ha necesitado tres cosas: abrirse al exterior, liberalizar los sectores más protegidos de la economía a través de las reformas y disminuir el exceso regulativo.
En cualquier caso, ha recordado que España ha conseguido superar una situación límite y que las tendencias ahora apuntan a un mayor crecimiento en el futuro y un menor desempleo, lo que ha llevado al Gobierno ha poner en marcha políticas para apuntalar el crecimiento, como la reforma fiscal.
También en este contexto ha puesto en marcha los Presupuestos de 2015, unas cuentas «continuistas» que mantienen los niveles de gasto, hacen frente a los compromisos ineludibles y permiten recudir el déficit por la vía de los ingresos, «la más sana».
Preguntado por las dudas que generan los ingresos presupuestados, Nadal ha recordado que el año pasado ocurrió lo mismo y el Gobierno cumplió con sus previsiones de ingresos y de déficit. «Este año vamos por mismo camino y la credibilidad está del lado del Gobierno», ha subrayado.
