El Ibex 35 se ha anotado una caída del 0,31% en la sesión de este miércoles, que le ha llevado a poner en peligro la barrera de los 9.200 puntos.
El selectivo español, que en los primeros compases de la jornada se acercaba a conquistar la barrera de los 9.300 enteros, se ha dado la vuelta y ha cerrado en los 9.202,2 puntos.
Los mayores ascensos los han presentado Solaria (+3,41%), Siemens Gamesa (+3,03%), Acciona (+1,91%), Endesa (+1,69%), Iberdrola (+1,15%), Cellnex (+1,12%) e IAG (+0,84%).
Por el contrario, han destacado en ‘rojo’ Sabadell (-4,33%), CaixaBank (-2,09%), Arcelormittal (-2%), Acerinox (-1,85%), Santander (-1,81%) y Bankinter (-1,74%).
Los inversores, que siguen pendientes del desenlace de la reunión de política monetaria de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, han conocido que la tasa de inflación interanual del Reino Unido escaló en mayo hasta el 2,1%, la mayor subida de los precios desde julio de 2019.
Por otro lado, este miércoles la Comisión Europea ha aprobado el plan de recuperación elaborado por el Gobierno español con las reformas e inversiones con las que quiere captar las ayudas del fondo anticrisis de la UE, un paso que acerca el desembolso de los primeros 9.000 millones que llegarán en julio en forma de anticipo.
Respecto al turismo, la Unión Europea ha acordado incluir a Estados Unidos en la lista de destinos considerados seguros en el contexto del control del coronavirus, si bien la actualización del listado sigue limitando la entrada a un grupo de países y mantiene fuera a Reino Unido.
En este escenario, resto de plazas europeas ha cerrado con avances del 0,17% en Londres, del 0,2% en París y del 0,12% en Milán, mientras que la Bolsa de Fráncfort ha cedido un 0,12%.
El barril de petróleo West Texas Intermediate (WTI), de referencia para Estados Unidos, cotizaba en 72,93 dólares, mientras que el crudo Brent, de referencia para Europa, marcaba un precio de 74,91 dólares.
Por último, la cotización del euro frente al dólar se colocaba en 1,2113 ‘billetes verdes’, mientras que la prima de riesgo española se mantenía en 64 puntos básicos, con el interés exigido al bono a diez años en el 0,393%.