El Ibex 35 acumulaba una caída del 1,12% hacia la media sesión, lo que implica un descenso de unos 108 puntos, hasta situarse en los 9.537,9 enteros, después de que este miércoles la Reserva Federal de Estados Unidos decidiera dejar sin cambios los tipos de interés en un rango objetivo de entre el 5,25% y el 5,50%.

A pesar de la decisión de la Fed de pausar las subidas de tipos, el presidente del banco central, Jerome Powell, indicó en la rueda de prensa posterior que no se descartaba alguna subid adicional del precio del dinero en lo que queda de año.

Durante los primeros compases de negociación de este jueves también se ha conocido que el Banco Nacional Suizo ha decidido dejar sin cambios los tipos de interés en el 1,75%, mientras que el Banco de Suecia ha decidido elevarlos hasta el 4%, esto es, 25 puntos básicos más, y el Banco de Noruega los ha situado en el 4,25%, también 25 puntos básicos más.

Los inversores están ahora pendientes de lo que decida hacer también el Banco de Inglaterra con respecto al precio del dinero.

En este contexto, únicamente dos valores han logrado escapar del ‘rojo’ que ha teñido a todo el Ibex. Bankinter subía un 1,54% en la media sesión, mientras que CaixaBank escalaba un 0,58%.

Entre el resto de valores, los mayores descensos eran los de Acciona (-2,53%), Colonial (-2,40%), Meliá (-2,20%), Solaria (-2,16%), IAG (-1,97%), ArcelorMittal (-1,94%) y Aena (-1,91%).

Las caídas bursátiles no eran exclusividad del Ibex 35, sino generales en el resto de las principales plazas europeas. Londres se dejaba un 0,59% en la media sesión; París, un 1,32%; Fráncfort, un 0,96%; y Milán, un 1,31%.

De su lado, el barril de Brent se situaba en los 92,58 dólares, un 1,01% menos, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) alcanzaba los 88,77 dólares, un 0,99% menos.

El rendimiento del bono español con vencimiento a 10 años escalaba en la media sesión hasta el 3,787%, desde el 3,75% registrado al cierre del jueves. De esta forma, la prima de riesgo frente a la deuda alemana se elevaba en dos décimas, hasta los 105,1 puntos básicos.

En el mercado de divisas, el euro se mantenía prácticamente estable frente al dólar y cotizaba en 1,0656 dólares por cada unidad de la divisa comunitaria.