El Ibex falla en su intento de atacar los 11.600 puntos

El selectivo concluye la semana perdiendo un -0,36 por ciento hasta los 11.554 puntos y pone fin a una racha de cuatro sesiones consecutivas subiendo. El resto de bolsas europeas se han comportado de manera similar a excepción de la británica, donde el Footsie ha subido un 0,26 por ciento gracias al efecto Vodafone, que se ha disparado casi un +5 por ciento.

Durante la jornada hemos contado con varias referencias macroeconómicas, pero ante la falta de noticias relevantes, la sesión se puede calificar de aburrida: sin apenas volumen ni volatilidad. Lo único interesante se ha producido en los mercados de divisas. Después de que EE.UU. publicase un IPC de -0,2 por ciento en abril, el eurodólar ha pasado en unos minutos de cotizar en casi 1,12 a hacerlo en 1,10.

Europa finaliza una semana marcada por las declaraciones que hizo el martes un miembro del BCE, en las que afirmó que el organismo comprará aún más bonos de los inicialmente previsto en su planes de estímulo. Además de la relajación de los bonos europeos, estos comentarios han provocado que el eurodólar retorne al 1,10, lo que ha acabado por traducirse en subidas en los precios de las acciones. Sin ir más lejos, el Ibex ha acumulado una subida del 2,1 por ciento durante la semana.

A falta de unas horas para el cierre, en Wall Street los índices S&P y Dow Jones caen levemente cerca de un -0,15 por ciento. Por el contrario, el Nasdaq sube ligeramente buscando los 5.100 puntos.

A pesar de la cercanía de las elecciones municipales, el Ibex se ha mostrado poco volátil hoy. Aunque a corto plazo no deberían tener demasiado impacto, sí que servirán de antesala para las elecciones generales de dentro de unos meses. Veremos a ver el lunes qué sucede tras conocer los resultados.

Dentro del selectivo español, los  mayores movimientos de hoy se han producido en Banco Popular (+1,1 por ciento), IAG (-2,2 por ciento), e Indra (-1,4 por ciento)

A nivel macroeconómico, hoy hemos conocido varios indicadores. Por primera vez en 7 meses ha descendido la lectura de la encuesta IFO alemana. La del mes de mayo podría estar señalando un menor optimismo sobre el crecimiento de la Eurozona. La cifra ha descendido una décima hasta 108,5. La máxima preocupación sigue siendo Grecia, ya que en junio comienzan a vencer los pagos más fuertes que debe efectuar a sus acreedores. El dato de expectativas desciende 4 décimas respecto al dato anterior y se sitúa en 103,0, en línea con las estimaciones.