En una jornada de ida y vuelta, las bolsas europeas han cerrado con signo mixto. Mientras que en España las cuentas trimestrales de BBVA o Ferrovial han frenado al Ibex, que ha cedido un -0,35%, las bolsas de Alemania y Francia han sumado un +0,46% y un +0,26% respectivamente. Esta diferencia entre las bolsas de nuestro país y las del resto de Europa ha sido una tónica que se ha venido repitiendo durante el mes de octubre. Mientras que el Ibex ha avanzado un +8,3%, el Eurostoxx ha sumado un +10,2%.
Este hecho también se ha podido apreciar en el mercado de deuda, donde la prima de riesgo española ha subido hoy 4 puntos básicos mientras que las de otros países comparables apenas ha variado. La diferencia entre las primas de riesgo de España e Italia se amplía hasta 19 puntos básicos (115 vs 96 puntos básicos). El motivo podría ser la cercanía de las elecciones y la amenaza soberanista en Cataluña.
Dentro del Ibex, han encabezado las pérdidas varias empresas que han presentado resultados: BBVA (-3,46%), IAG (-2,11%), Acerinox (-1,41%) y Ferrovial (-1,35%). La más alcista ha sido OHL (+7,31%) tras anunciar que completó su ampliación de capital con éxito. Le han seguido valores como Sacyr (+4,41%) o Abengoa (+3,62%).
En la agenda macroeconómica hemos visto cómo la tasa de desempleo de la eurozona se ha contraído ligeramente en el mes de septiembre hasta el 10,8%, frente al 10,9% de su dato anterior. Hemops visto un ligero aumento del dato de IPC estimado del mes de octubre, que sale de números negativos (-0,1% anterior) para para volver al 0,0%.
El PIB de España creció un 0,8% en el tercer trimestre, en línea con su estimación y ligeramente por debajo de su crecimiento en el anterior trimestre (1,0%). En términos interanuales, el PIB avanzó un 3,4%.
En EE.UU., crecen menos de lo esperado tanto los ingresos como los gastos personales, con un tímido avance de 0,1% y estimaciones de 0,2% en ambos casos. Estos datos coinciden con las débiles lecturas de la confianza del consumidor, y mantienen abierta las preocupaciones sobre un posible debilitamiento del mercado laboral, al que se añade la falta de aumento de salarios y una alta tasa de ahorro. Quizá la economía doméstica de EE.UU. y su consumo privado no estén tan aislados de las turbulencias de los mercados globales como algunos datos hacían pensar.
El índice de compras de Chicago sorprende con una lectura de 56,2 (vs 49,5 estimado y 48,7 anterior), mientras que el dato de confianza de la Universidad de Michigan defrauda con 92,5 puntos (vs 92,5 estimado y 92,1 anterior).
La reunión de tipos de la Reserva Federal del jueves fue la cita clave de la semana. Antes de la misma, las quinielas apuntaban a una subida de tipos en 2016, pero lo cierto es que tras escuchar a Janet Yellen, no es descartable que la subida se produzca en la reunión de diciembre. Como es habitual, volvió a ligar esta decisión a la evolución de los datos económicos que tengan para entonces.
En España, el grueso de presentaciones de resultados empresariales ha sido esta semana, y lo cierto es que ha dejado a los inversores algo desencantados. Salvo casos puntuales como los de Mediaset o Acciona, las cifras de la mayoría de empresas han defraudado. Esto lo hemos podido comprobar con las cuentas de los dos grandes bancos, que han dejado patente la preocupación por su exposición a Latinoamérica y la dificultad de ganar más dinero concediendo crédito en un contexto de tipos históricamente bajos.
De cara a la semana que viene seguiremos atentos a algunas referencias macroeconómicas (con los PMI y el informe de empleo americano como principales indicadores) y a la temporada de presentación de resultados trimestrales. Contaremos, entre otras, con las cuentas de Bankia, Gas Natural o Telefónica en España; HSBC, BMW o ING en Europa; y las de Facebook y Walt Disney en EE.UU., donde ya han presentado la mayoría de compañías.
Felipe López-Gálvez, Selfbank