El IESE cree que el "parón" de la economía europea no llegará a afectar a España

El nuevo Indicador de Dinamismo Laboral (IDL) desarrollado conjuntamente por el Instituto de Estudios Superiores de la Empresa (IESE) y Meta4 apunta a que el crecimiento de España no se verá afectado por la debilidad de la economía europea en el tercer trimestre y tampoco en el cuarto.

Según explicó José Ramón Pin, profesor del IESE y director del Centro Internacional de Investigación de Organizaciones (IRCO), el IDL que se presentó hoy en la sede de la CEOE «puede ser un indicador adelantado de la economía» de hasta «dos trimestres». Este indicador presenta una tendencia «positiva» del 16,4% frente a las cifras «planas» que rondaban el 12,4% en 2010 y hasta principios de 2013.

El IDL es un indicador que mide la movilidad laboral entre puestos de trabajo ya existentes, es decir, cambios de trabajadores que no afectan al tamaño de la plantilla.

En este sentido, el presidente de IRCO destacó que, según señala el progreso del IDL, el crecimiento de la economía española podría alcanzar entre el 1,5% y el 2% este año, ya que el aumento del 16,4% que comenzó en el segundo trimestre de 2013 es señal de que «las empresas se mueven porque están viendo oportunidades» y, en este sentido, «si están redistribuyendo sus efectivos de forma distinta es porque están poniéndoles en los lugares donde hay más oportunidades de negocios».

Por otra parte, el informe señala que un 20% de los trabajadores registra un cambio en su situación laboral cada trimestre. De ese 20%, un 3,5% experimenta un cambio en su situación laboral porque se crea empelo, un 2,5% pierde su trabajo y un 14% experimenta un recambio, es decir, gran parte de los cambios en la situación laboral de los trabajadores se realiza por medio de movimiento entre los puestos que ya existían y siguen existiendo.

Así pues, un IDL alto evidencia una mayor rotación en las plantillas de las distintas empresas, lo que a su vez presenta mayores oportunidades para que aquellos que hayan quedado excluidos del mercado laboral. No obstante, un IDL alto supone, de la misma manera, que las empresas no son capaces de retener su «capital humano», algo que en estas etapas es «un reto» para las mismas.

Carlos Pardo, CEO de Meta 4, afirmó que el IDL «nace con la vocación de ser un índice de referencia para las empresas y para la gestión de los recursos humanos».