El Índice de Precios de Consumo (IPC) de Alemania se situará en enero en el 2,9% interanual, lo que representa ocho décimas menos que el dato del 3,7% registrado en diciembre de 2023 y la menor subida interanual de los precios desde junio de 2021, según la primera estimación publicada por la Oficina Federal de Estadística (Destatis).
A su vez, el dato de inflación armonizada, empleado por Eurostat en sus estadísticas, habría sido del 3,1% en el arranque de 2024, siete décimas por debajo del 3,8% de diciembre, también en mínimos desde 2021.
La oficina estadística comunitaria publicará mañana las cifras de inflación correspondientes a enero para el conjunto de la zona euro.
La evolución de los precios en el primer mes de 2024 reflejaría la caída del 2,8% del coste de la energía, después de una subida interanual del 4,1% en diciembre, mientras que el aumento del precio de los alimentos se habría moderado al 3,8% desde el 4,5% del mes anterior.
«Los precios de la energía en enero de 2024 fueron un 2,8% más bajos que en el mismo mes del año anterior, a pesar de la suspensión del freno a los precios de la energía y la introducción de un precio más alto del carbono (solo en Alemania), que afecta el precio de los combustibles fósiles como los de los automóviles, el gasóleo para calefacción y el gas natural», ha destacado Destatis.
Por contra, los servicios habrían acelerado en enero su subida al 3,4%, dos décimas por encima del incremento interanual registrado en diciembre de 2023.
De este modo, excluyendo del cálculo el impacto de los alimentos y de la energía, la inflación subyacente de Alemania se habría situado en el 3,4%, frente al 3,5% del mes anterior.
FRANCIA.
De su lado, el IPC de Francia se habría moderado en enero hasta el 3,1% en términos interanuales desde el 3,7% registrado en diciembre, según la primera estimación provisional publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos (Insee), lo que supondría el menor encarecimiento del coste de la vida desde enero de 2022, antes del comienzo de la guerra de Ucrania.
«Esta disminución de la inflación debería deberse a la desaceleración anual de los precios de la energía, los alimentos y los productos manufacturados», ha explicado el instituto estadístico galo.
En concreto, el precio de la energía habría subido en enero un 1,8% anual, frente al alza del 5,7% de diciembre, mientras que los alimentos se habrían encarecido un 5,7%, por debajo de la subida interanual del 7,2% en el último mes de 2023.
Asimismo, en el arranque de 2024, el precio de las manufacturas habría moderado su subida al 0,7%, la mitad que en diciembre de 2023, aunque los servicios habrían aumentado su precio un 3,2% interanual, una décima más que en el mes anterior.
De su lado, la tasa de inflación armonizada de Francia, empleada por Eurostat en sus estadísticas, se habría situado en enero en el 3,4%, siete décimas por debajo del 4,1% observado en diciembre de 2023.