El mercado de ‘foodservice’, que abarca la restauración comercial y otros canales menores, como las tiendas de conveniencia, el vending o las cantinas de empresa, estima iniciar su recuperación en 2021 con crecimientos a doble dígito, que oscilará entre el 16% y el 38%, tras un nefasto 2020 por el coronavirus.
En concreto, el sector ha empezado este año todavía muy afectado por las restricciones y limitaciones impuestas ante una nueva ola de contagios, con un descenso de las ventas de en torno al 40% respecto al inicio de 2020, cuando aún no había impactado la crisis sanitaria en España, según los datos de la empresa de investigación de mercados The NPD Group.
«No obstante, empezamos a ver la luz al final del túnel. La llegada de las vacunas y el levantamiento progresivo de las restricciones comienzan a dar un poco de aire al consumo fuera del hogar y permitirán que se vaya recuperando progresivamente a lo largo del año», ha explicado la directora de Foodservice de NPD en España, Edurne Uranga.
Uranga ha explicado que las previsiones actuales de NPD, según diferentes escenarios analizados, apuntan a que el negocio del sector cerrará 2021 entre un 16% y un 38% por encima del de 2020, pero «sin recuperar aún todo lo perdido este fatídico año».
De esta forma y dependiendo de la velocidad de recuperación, el pronóstico para 2021 arroja unas ventas entre el 19,5% y el 32% inferiores a las de 2019, el año previo a la pandemia, según sea la recuperación más rápida o más lenta, respectivamente.
Uranga ha explicado que la recuperación del consumo en ‘foodservice’ estará muy ligada a los nuevos hábitos y estilos de vida pospandemia, que generarán un nuevo mapa de ocasiones de consumo en el sector.
De esta forma, si en la era pre-Covid el trabajo y el tráfico relacionado con estilos de vida activos (por ejemplo, salir de compras o hacer recados) eran las ocasiones que aportaban mayor crecimiento al sector, ahora destaca el dinamismo de las ‘home meals’ (comida preparada fuera, pero que se toma en casa), ya sea vía ‘delivery’ o ‘take away’.
Igualmente, ha señalado ocasiones muy relevantes para el sector -como por ejemplo aquellas ligadas al entorno laboral, que actualmente representan el 20,9% de la facturación total de ‘foodservice’, incluyendo no solo las propias comidas del mediodía, sino todos los momentos snacking o desayunos relacionados con el tiempo en la oficina o el desplazamiento hacia el lugar de trabajo- seguirán siendo muy relevantes para el consumo en este mercado, pero cambiarán fuertemente sus reglas de juego y su funcionamiento.
Por otro lado, el informe pone de manifiesto el incremento del ‘delivery’, que generó un negocio cercano a los 1.770 millones de euros en España en 2020, debido al mayor tiempo que pasó el consumidor en casa, y duplicó su peso hasta concentrar el 8,1% de las ventas de ‘foodservice’.
El servicio a domicilio sigue mostrando sólidos crecimientos y, según las estimaciones de NPD, mantendrá su peso en el sector (en un escenario de recuperación rápida) o lo elevará hasta en dos puntos, en el caso de que sea más lenta, al cierre del ejercicio.
En la actualidad, más de la mitad del negocio del ‘delivery’ ya es digital: los pedidos se realizan bien a través de agregadores (35% del valor total) o bien a través de la web o la aplicación del restaurante (16%), mientras que el resto se hace vía telefónica (48%).
Además, la pandemia ha provocado un aumento considerable de la oferta que se entrega a domicilio. Así, si hace cinco años los especialistas del canal (pizzerías, restaurantes chinos y otros locales especializados) concentraban el 70% del negocio, hoy estos representan menos del 50%.
«El ‘delivery’ ha pasado de ser una ocasión a ser un canal que cubre diferentes ocasiones de consumo», ha subrayado Uranga.