El nuevo Mercedes-AMG GLC Coupé, para un estilo de vida elegante y deportivo

Unas semanas después de la presentación del nuevo SUV Mercedes-AMG GLC, la marca de automóviles deportivos y de altas prestaciones, presenta el nuevo GLC Coupé. Completa la exitosa gama del segmento medio de Mercedes-AMG y, con su combinación de elegancia dinámica y rasgos característicos de AMG, señala otro hito en la oferta de modelos. Sus llamativas proporciones y excitantes superficies subrayan su inconfundible aspecto, complementado por el interior de alta calidad.

Hay dos potentes variantes del modelo entre las que elegir: el GLC 63 S E PERFORMANCE Coupé es el primer SUV coupé híbrido de altas prestaciones de la marca (consumo combinado de combustible 7,5 l/100 km, emisiones combinadas de CO2 170 g/km, consumo combinado de energía 12,7 kWh /100 km)1 con 500 kW (680 CV) de potencia combinada. También está el modelo de acceso, el GLC 43 4MATIC Coupé (consumo combinado 10,2-9,8 l/100 km, emisiones combinadas de CO2 232-223 g/km)2 con 310 kW (421 CV) de potencia y un impulso de adicional de 10 kW (14 CV) gracias al alternador arrancador accionado por correa. El amplio equipamiento de serie con dirección en el eje trasero, tracción total, cambio AMG SPEEDSHIFT MCT 9G con embrague bañado en aceite y tren de rodaje AMG RIDE CONTROL con sistema de amortiguación adaptativa contribuye al dinamismo de la conducción.

La silueta deportiva con una transición fluida hacia la zaga es la característica principal del nuevo Mercedes-AMG GLC Coupé. Los faros delanteros conectan con la parte superior del embellecedor del radiador específico AMG y acentúan así la anchura del vehículo. El splitter delantero AMG con diseño jet wing y grandes entradas de aire, aletas verticales y flics adicionales aporta acentos llamativos e exclusivos. Los precisos bordes laterales acentúan las proporciones deportivas y los poderosos pasos de rueda.

El embellecedor de los pasos de rueda en el color de la carrocería y el embellecedor AMG de los faldones laterales se integran armoniosamente en la elegante silueta. El aspecto deportivo también se acentúa con las vías anchas y las llantas enrasadas en dimensiones de 19, 20 o 21 pulgadas. Varias de las llantas ofrecidas de serie presentan una estética brillante con superficies bicolor. El equipamiento opcional incluye estriberas optimizadas para la entrada y otros numerosos elementos.

Los pilotos traseros de dos piezas amplían visualmente la vista trasera con un elemento de unión de color negro y rojo oscuro. El faldón trasero específico AMG con aspecto de difusor (GLC 43) o con una inserción difusora adicional (GLC 63 S), así como los dos embellecedores dobles de la salida de escape (redondos en el GLC 43, trapezoidales en el GLC 63 S) refuerzan la poderosa imagen del SUV coupé.

Interior con aspecto deportivo y elegante

En el interior, los asientos AMG en símil de cuero ARTICO/MICROCUT AMG de microfibra con gráficos y tapicería distintivos añaden un toque deportivo. Opcionalmente se ofrecen tapizados de cuero y napa con el escudo AMG en relieve en los reposacabezas delanteros. Los asientos AMG Performance también están disponibles como opción.

El volante AMG Performance de cuero napa (GLC 43) o símil de cuero napa/Microfibra MICROCUT (GLC 63 S) también se monta de serie. Está achatado en la parte inferior, perforado en la zona de agarre y equipado con levas de cambio de aluminio de color plateado. Los dos botones redondos del volante AMG permiten manejar con rapidez e infalibilidad diversas funciones de conducción dinámica y los programas de propulsión AMG DYNAMIC SELECT. El ambiente deportivo-lujoso se completa con pedales deportivos AMG, alfombrillas AMG y umbrales de puerta iluminados con la inscripción AMG.

El sistema de infoentretenimiento MBUX incluye varias pantallas y funciones específicas de AMG. Entre ellos se incluyen pantallas especiales en el cuadro de instrumentos, en la pantalla central multimedia con orientación vertical de la consola central y en el Head-up Display opcional. El modo «Supersport» exclusivo de AMG ofrece la posibilidad de mostrar diversos contenidos a través de una estructura vertical. Esto incluye un menú de configuración que muestra los ajustes actuales del tren de rodaje o la transmisión. Además, el conductor puede visualizar un mapa de navegación o datos de consumo con el estilo «Supersport».

También está integrado el AMG TRACK PACE (de serie en el GLC 63 S, opcional para el GLC 43), el sistema de registro de datos para su uso en circuito. El software registra más de 80 datos específicos del vehículo, como la velocidad, la aceleración y el ángulo de giro, diez veces por segundo mientras se circula por un circuito de carreras. También se ofrece como información la visualización de los tiempos por vuelta y por sector, así como herramientas adicionales de entrenamiento y análisis.

Motor AMG de 2.0 litros con turbocompresor eléctrico

En el corazón de los nuevos modelos Mercedes-AMG GLC Coupé, se encuentra el motor AMG de 2.0 litros y cuatro cilindros, que combina tecnologías innovadoras y altas prestaciones con una eficiencia ejemplar. El propulsor se mantiene fiel a una tradición típica de la marca: No sólo se ha desarrollado íntegramente en la planta de Affalterbach, sino que también se monta allí según el principio «Un hombre, un motor». De este modo, Mercedes-AMG combina la artesanía de sus empleados altamente cualificados con los últimos métodos de producción de la Industria 4.0 y un alto grado de digitalización.

El motor, conocido internamente como M139l (l de instalación longitudinal), es hasta ahora el único motor de serie del mundo turboalimentado con un turbocompresor eléctrico alimentado por el sistema eléctrico de a bordo adicional de 48 voltios, que también incluye el alternador arrancador accionado por correa (RSG). El sistema es un derivado directo de la tecnología que el equipo Mercedes-AMG Petronas F1 ha utilizado con éxito en la categoría reina del automovilismo durante muchos años. La nueva forma de turbocompresión garantiza una respuesta especialmente espontánea en toda la gama de revoluciones. Esto se traduce en una experiencia de conducción aún más dinámica, al tiempo que aumenta la eficiencia.

El principio de funcionamiento del turbocompresor eléctrico

Un motor eléctrico de unos cuatro centímetros de grosor está integrado directamente en el eje del turbocompresor, entre la rueda de la turbina en el lado de los gases de escape y la rueda del compresor en el lado de la admisión. Éste acciona directamente el eje del turbocompresor y se controla electrónicamente, acelerando la rueda del compresor antes de que el flujo de gases de escape se haga cargo del accionamiento de forma convencional.

Esto mejora significativamente la respuesta directamente desde el ralentí y en toda la gama de revoluciones. El motor de combustión responde aún más espontáneamente al pisar el pedal del acelerador, mientras que la sensación de conducción es notablemente más dinámica. Además, la electrificación del turbocompresor permite un mayor par a bajas revoluciones. Esto también aumenta la agilidad y optimiza la aceleración desde parado. Incluso cuando el conductor levanta el pie del acelerador o frena, la tecnología es capaz de mantener la presión de sobrealimentación en todo momento. Esto garantiza una respuesta continuamente directa. En comparación con el GLC 43, el turbocompresor del GLC 63 S es significativamente mayor. Esto permite un mayor caudal de aire y, por tanto, más prestaciones. Además, el motor eléctrico integrado funciona con el sistema de alto voltaje de 400 voltios.

Sus precios oscilan desde 64.183 euros, hasta 83.805 euros, según equipamiento y motorización.