La economía española creció un 2% en el tercer trimestre del año, nueve décimas más que en el segundo, según el avance de datos de la Contabilidad Nacional publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Sin tener en cuenta el crecimiento del 16,8% registrado en el tercer trimestre de 2020 tras el confinamiento, el avance del PIB entre julio y septiembre de este año es el más elevado desde el cuarto trimestre de 1972. Es, además, el segundo incremento trimestral consecutivo tras el del segundo trimestre.
El crecimiento del PIB en los meses de verano se vio impulsado fundamentalmente por la inversión, que aumentó un 1,3%, frente al retroceso trimestral del 2,2% del segundo trimestre. Es el mayor alza de la inversión desde el primer trimestre de 2019.
El consumo, por su parte, se contrajo un 0,3% entre julio y septiembre, en contraste con el avance del 3,5% que experimentó en el trimestre anterior. El de los hogares retrocedió un 0,5%, frente al repunte del 4,7% del trimestre anterior, mientras que el gasto público moderó su crecimiento trimestral ocho décimas, desde el 0,9% del segundo trimestre al 0,1% en el tercero.
Las exportaciones aceleraron en el tercer trimestre su ritmo de crecimiento trimestral, desde el 0,9% al 6,4%, mientras que las importaciones echaron el freno: aumentaron un 0,7%, en contraste con el avance del 4,2% del trimestre anterior.
Por sectores, el único que recortó su valor añadido bruto en el tercer trimestre fue la agricultura, con un descenso del 5,5%. Por contra, el de la construcción subió un 1,8%; el de la industria creció un 2%, y el de los servicios avanzó un 3,2%.
El PIB a precios corrientes alcanzó los 301.432 millones de euros en el tercer trimestre. Es la primera vez que se superan los 300.000 millones de euros desde el cuarto trimestre de 2019, cuando sumó 315.023 millones.
En los nueve primeros meses del año, el PIB a precios corrientes totalizó 881.040 millones de euros, un 5,9% más que en el mismo periodo de 2020 pero un 5,2% por debajo del de 2019.
ECONOMÍA: LA RECUPERACIÓN «SE ACELERA»
Tras conocerse los datos del PIB, el secretario de Estado de Economía, Gonzalo García Andrés, ha destacado que, en términos anualizados, el crecimiento trimestral en un 2% supone un avance de la economía española superior al 8%.
«Junto con los datos de la EPA conocidos ayer, este dato del PIB confirma que durante el tercer trimestre la recuperación se ha acelerado», ha señalado García, que ha añadido que el avance en la campaña de vacunación y la mejora de la movilidad impulsaron el crecimiento de la actividad y del empleo.
A su juicio, estos datos colocan a España en una «buena posición» para afrontar el cuarto trimestre del año, en el que el balance de riesgos «va a estar marcado por los cuellos de botella en la oferta, el alza de los precios energéticos y su efecto en la inflación».
MODERACIÓN DE LA TASA INTERANUAL AL 2,7%
En tasa interanual, el PIB aumentó un 2,7%, frente al 17,5% del segundo trimestre, debido al menor empuje de la demanda nacional. En concreto, su contribución al PIB fue de 1,5 puntos, casi 16 puntos menos que en el trimestre anterior. La demanda externa, por su parte, aportó 1,2 puntos al crecimiento interanual del PIB, un punto más que en el trimestre anterior y su mayor contribución positiva desde el tercer trimestre de 2016.
El consumo de los hogares avanzó un 1,1% interanual en el tercer trimestre, frente al aumento del 23,4% del segundo trimestre, mientras que el gasto público moderó su crecimiento interanual un punto, hasta el 2,9%. La inversión, por su lado, retrocedió un 0,2% interanual, en contraste con el incremento del 18,8% del trimestre anterior.
Las exportaciones e importaciones moderaron en el tercer trimestre sus crecimientos interanuales en más de 20 puntos, hasta el 13,7% y el 10,2%, respectivamente.
Por sectores, servicios e industria elevaron su valor bruto añadido en el tercer trimestre, con avances del 4,8% y del 0,4%, respectivamente, porcentajes mucho más moderados que los del trimestre anterior. Por contra, construcción y agricultura mostraron retrocesos del 8,2% y del 10%, respectivamente.
El PIB a precios corrientes creció un 4,2% en tasa interanual, 14,6 puntos menos que en el segundo trimestre.
El deflactor implícito del PIB aumentó en el tercer trimestre un 1,5% respecto al mismo trimestre de 2020, cuatro décimas más que en el trimestre anterior.
La remuneración de los asalariados creció un 6,1% interanual en el tercer trimestre, más de seis puntos menos que en el trimestre anterior, mientras que el excedente de explotación bruto bajó un 1,3%.
La productividad por puesto de trabajo equivalente a tiempo completo descendió un 3,3% en el tercer trimestre en tasa interanual, mientras que la productividad por hora efectivamente trabajada registró una caída del 0,6%.
Por último, el coste laboral unitario avanzó un 3% interanual en el tercer trimestre de este año, tasa 1,5 puntos superior a la del deflactor implícito de la economía.
MÁS DE UN MILLÓN DE EMPLEOS EN UN AÑO
El INE recuerda que este avance de datos está elaborado con la información actualmente disponible sobre la evolución económica. La mayoría de los indicadores estadísticos coyunturales ofrecen a día de hoy resultados hasta el segundo mes del trimestre (agosto).
No obstante, como ya ocurriera en el avance de resultados de los últimos trimestres, el INE también ha podido contar con resultados adelantados de algunas de sus fuentes referidos al mes de septiembre, estimaciones de indicadores basados en datos administrativos y otras fuentes adicionales. En todo caso, precisa que el volumen de información adelantada del que se ha dispuesto en este avance «ha sido menor que en ocasiones anteriores».
Esto significa que el avance de datos publicado este viernes podría variar cuando se publiquen los datos definitivos. Así ocurrió ya en el segundo trimestre cuando se avanzó un crecimiento del PIB del 2,8% que luego se rebajó hasta el 1,1%.
Estadística recuerda que, en el contexto actual, el análisis de ciertas variables resulta más relevante que en momentos anteriores. Es el caso de las horas efectivamente trabajadas en la medición de la evolución del empleo.
En el tercer trimestre, el empleo de la economía, en términos de horas trabajadas, aumentó un 4% respecto al trimestre anterior. Esta tasa es de menor magnitud en el caso de los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo (del 0,0%, lo que supone un punto menos que en el primer trimestre) por el aumento de la jornadas medias a tiempo completo (4%).
En términos interanuales, las horas trabajadas se incrementaron un 3,3% en el tercer trimestre, tasa 26,2 puntos inferior a la del segundo trimestre.
Según el INE, los puestos equivalentes a tiempo completo subieron un 6,2% interanual, casi 13 puntos menos que en el segundo trimestre, lo que supone un incremento de 1.069.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en un año.