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El poder mágico de la diversión en el aprendizaje

Quién no recuerda esas tediosas, soporíferas y aburridísimas clases que, de pequeño y no tan pequeño, en alguna asignatura tuvo que soportar.

Es algo de sentido común, cuando algo aburre soberanamente a alguien, su mente se bloquea y no puede aprender nada. Sin embargo, si uno está a gusto, motivado, ilusionado y divirtiéndose, ocurre todo lo contrario, la mente se abre, el proceso de aprendizaje se activa y la memoria se vuelve receptiva, pues las emociones positivas median para fijar el conocimiento a través de una experiencia vital excitante y memorable. Así funciona la memoria, cualquier experiencia que conlleve una emoción asociada o que tenga un significado profundo o determinante para alguien, su memoria lo fijará para siempre.

En ese sentido, hay que intervenir conscientemente en el proceso de aprendizaje y elegir un método y un profesor con el que uno se sienta a gusto, se divierta, y hable de las cosas que a uno como alumno le interesan particularmente, de manera que uno esté centrado en enterarse y comentar temas de interés personal, en consecuencia motivado, divirtiéndose y, como efecto colateral, esté aprendiendo nuevas expresiones y vocabulario constantemente, ya que en ese proceso de comunicación interactiva inevitablemente aparecerán palabras, estructuras y expresiones que no se conocen y que se aprenderán «de paso». Este proceso se engloba en lo que se podría denominar «aprendizaje subliminal o colateral».  En ese sentido, desde English Tickety Boo afirman que el sentido del humor juega un papel importantísimo, pues no hay mejor manera de divertirse que dirigirse directamente a la fuente de diversión por excelencia, que es el sentido del humor.

Los británicos, hay que decir, son particularmente buenos en este campo. Hay decenas de «sitcoms» (situation comedies – comedias de situación) en las que su genuino humor inteligente, irónico y a veces mordaz, hace las delicias de cualquier persona y de cualquier edad, en cuyas escenas se puede sentir reflejada su propia experiencia personal y cuyo desarrollo y desenlace humorístico es absolutamente hilarante. En esos momentos se conecta inevitablemente con una parte esencial del ser humano, la necesidad de disfrutar de la vida, celebrarla, divertirse y guardar esos momentos como tesoros personales en la memoria, para acudir a ellos siempre que uno quiera divertirse de nuevo recordándolos. Si conscientemente se dirigen los posibles momentos de diversión hacia situaciones donde el inglés como idioma y su cultura sea uno de los elementos principales o la fuente de los mismos, se habrá conseguido que el inglés se haya «colado» y participe de todo ese proceso, se habrá logrado integrar este idioma en la vida de uno y formará parte de la misma para siempre. En English Tickety Boo, existe una sección donde precisamente se promueve esta idea. En la sección My Cosy Tea Corner (Mi Acogedor Rincón del Té) hay una introducción a las sitcoms y a otros temas de interés, con una amplia variedad de las mismas extendidas en el tiempo y en su temática, donde se sugieren algunas de las mejores, para empezar a divertirse riendo a carcajadas y aprendiendo al mismo tiempo.

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