El Servicio Postal de Estados Unidos está transportando un número inferior de votos por correo del que debería con el fin de que estos lleguen a tiempo para poder ser contabilizados en algunos de los estados clave en los que está en juego el resultado de las elecciones presidenciales, según informa la CNN, que cita archivos judiciales.
Por quinto día consecutivo, el proceso de transporte de los votos está siendo inferior al previsto, entre otros estados en Michigan, Wisconsin, Georgia, New Hampshire y Maine, donde todas las papeletas que lleguen después de la jornada electoral no serán contabilizadas.
Según el Servicio Postal, a nivel nacional el traslado de votos a tiempo cayó el domingo y el lunes, en comparación con el viernes, pasando del 91 por ciento al 90 por ciento. El descenso en el servicio se había notificado por primera vez el miércoles, cuando se informó que era del 97 por ciento, según CNN.
En el caso del distrito de Atlanta, en Georgia, se entregó menos del 52 por ciento de los votos por correo a tiempo el domingo y el lunes, mientras que en Carolina del Norte la cifra fue del 69 por ciento, los dos datos más bajos a nivel nacional. En el caso de Pensilvania, uno de los estados que podría inclinar la balanza en estas elecciones, se llegó al 80 por ciento.
Desde el Servicio Postal aclaran que no todos los votos enviados por correo siguen el proceso normal, sino que en algunas oficinas postales directamente se han sellado y entregado directamente a las juntas electorales para que puedan ser incluidos en el recuento. El organismo ha justificado las demoras en el reparto a la falta de personal por la pandemia.
El voto por correo ha adquirido una importancia particular en estas elecciones, ya que han sido muchos los ciudadanos que han optado por esta vía debido a las restricciones por el coronavirus. Según US Election Project, en total se han emitido unos 64,5 millones de votos por correo, del total de más de 100 millones de estadounidenses que han votado por anticipado antes de la jornada electoral.
Precisamente en Pensilvania, según ha informado este martes la secretaria de Estado, Kathy Boockvar, más de 2,5 millones de los votos por correo han sido devueltos, lo que supone más del 81 por ciento de los más del tres millones enviados en el estado.
El lunes, las autoridades de Filadelfia, la mayor ciudad del estado, hicieron saber que el recuento podría «fácilmente llevar varios días» debido a que se han emitido más de 400.000 votos por correo para estas elecciones.
En una carta abierta a los votantes de la ciudad, el alcalde, Jim Kenney, y la comisionada, Lisa Deeley, recordaron que no se podía comenzar a contar los votos por correo y anticipados hasta las 7.00 horas del 3 de noviembre, por lo que habrá papeletas por contar después de la noche electoral.