El Tesoro Público ha aprovechado la mejora de los mercados financieros para colocar 5.000,32 millones en bonos y obligaciones, en el rango máximo previsto, a tipos en mínimos históricos, favorecidos por una prima de riesgo que se sitúa por debajo de los 100 puntos básicos.
De esta forma, el organismo público ha superado ligeramente el objetivo máximo previsto de colocación (5.000 millones) para aprovechar la importante caída de los tipos de interés, que vuelven a mejorar en esta subasta sus mínimos históricos. La demanda ha superado los 11.000 millones de euros, por lo que ha más que duplicado lo finalmente colocado entre los inversores.
En concreto, el organismo público ha colocado 1.081,35 millones de euros en el bono a tres años, con un tipo marginal mínimo del 0,203%, por debajo del 0,409% de la anterior emisión celebrada en febrero. En este caso, la demanda solicitada ha superado los 4.000 millones, cuatro veces superior al dinero vendido en los mercados en este tipo de papel.
En la misma línea, en el bono a cinco años el Tesoro ha colocado 2.387,61 millones de euros con un tipo marginal del 0,543%, también inferior al 0,869% de la emisión previa realizada en enero y en mínimos históricos. La demanda ha duplicado lo finalmente adjudicado, hasta superar los 4.400 millones.
Por su parte, en la subasta de obligaciones con fecha de vencimiento en 2032, el Tesoro ha colocado 1.531 millones de euros, con una rentabilidad del 1,941%, y una demanda que ha rozado los 2.500 millones de euros.
La última vez que realizó una emisión similar a esta obligación (con el mismo cupón del 5,75%), en noviembre de 2012, el tipo ofrecido superó el 6% en un momento en el que la prima de riesgo llegó a superar ese mismo verano los 600 puntos básicos.
El Tesoro volverá a los mercados tres veces más en marzo. La próxima emisión se celebrará el día 17, con una subasta de letras, a la que seguirá una emisión más el día 19 de bonos y la última del mes, el día 24, también de letras.
EUROPA PRESS