El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha decidido adoptar medidas cautelares en el marco de la demanda interpuesta por Ucrania contra Rusia y ha instado al Gobierno de Vladimir Putin a que se «abstenga de tomar medidas susceptibles de constituir una amenaza para la vida y la salud de la población civil que se encuentra en el territorio ucraniano». Esta petición de respeto de los derechos humanos también se dirige a las autoridades ucranianas.
El presidente de la Sección Tercera del TEDH, el andorrano Josep Casadevall, ha decidido aplicar las medidas cautelares solicitadas por Ucrania al concluir que «la actual situación ha dado lugar a un riesgo continuo de que sean cometidas graves violaciones de la Convención Europea».
El Gobierno ucraniano interpuso el pasado 13 de marzo ante el tribunal con sede en Estrasburgo (Francia) una demanda contra Rusia en virtud del artículo 33 de la Convención Europea de Derechos Humanos, relativo a las relaciones entre estados.
El magistrado Josep Casadevall, con el objetivo de «prevenir las citadas violaciones», ha realizado un llamamiento «a las dos partes concernidas para que se abstengan de tomar cualquier medida, en particular de carácter militar, que puedan conllevar para la población civil atentados contra los derechos garantizados por la Convención».
La resolución del presidente de la Sección Tercera del tribunal hace mención especial al artículo 2, que proclama el derecho a la vida, y al artículo 3, que establece la prohibición de tratos inhumanos o degradantes.
El TEDH pide asimismo a Rusia y Ucrania que le informen «lo antes posible de las medidas que se llevaran a cabo para garantizar el respeto a la Convención».
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