El 26 de octubre de 2015 los consumidores de electricidad dejarán de pagar la moratoria nuclear de 1984, tras desembolsar en los próximos meses los últimos 35,7 millones y saldar así, tres décadas después, una deuda de 4.383 millones de euros.
Estos datos aparecen en el informe de ingresos y costes del sistema eléctrico para el ejercicio 2015 elaborado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). En el informe además se indica que los consumidores de electricidad costearán de forma fraccionada lo que queda de deuda nuclear hasta el 31 de agosto, con el objeto de que en septiembre se realice el último pago y de que a finales de octubre quede “amortizado totalmente” el último préstamo de la moratoria.
Esta moratoria consiste en una indemnización aprobada por el Gobierno en 1984 para indemnizar a los promotores de los proyectos de tres centrales nucleares cuya construcción había quedado suspendida. La medida afectó a las plantas de Lemóniz, Valdecaballeros y Trillo II. La compensación se pagó de una sola vez a cuatro empresas, que son Endesa, su filial Sevillana de Electricidad, Unión Fenosa (ahora Gas Natural Fenosa) e Iberdrola, y se distribuyó a razón de 2.273 millones para Lemóniz, 2.043 millones para Valdecaballeros y 66 millones para Trillo II.
El pago de la compensación fue asumido por el fondo de titulización de la moratoria nuclear, creado en 1996, con el objeto de que la cifra total quedara sufragada a través de la tarifa eléctrica durante 25 años a partir de 1995, esto es, hasta 2020, mediante un porcentaje inferior al 3,54%.
Posteriormente, los gestores del fondo certificaron que el ritmo de amortización había sido más rápido que el inicialmente previsto y fijaron para 2015 el vencimiento final de la deuda. Esta aceleración en los pagos, explica el fondo en su auditoría, es fruto de los aumentos de la demanda y de la reducción de los tipos de interés en los primeros años del siglo.
Ante esta circunstancia, en abril de 2006 entró en vigor un real decreto que fijó en el 0,33% el porcentaje de la tarifa eléctrica con destino específico para la moratoria y que situó en 2015 la amortización final de la deuda eléctrica, fecha que acaba de ratificar la CNMC en su informe de la semana pasada. La central de Lemóniz era propiedad de Iberdrola al 100% en el momento de la moratoria, mientras que Valdecaballeros estaba participada en un 48,08% por Iberdrola y en un 51,9% por Sevillana. En Trillo II participaban Unión Fenosa (63,6%) y Endesa (36,3%).
EUROPA PRESS