En otra jornada para olvidar, el Ibex pierde un 4,88%

Las bolsas europeas han registrado la peor sesión desde que comenzase 2016. Caídas generalizadas que han azotado con fuerza a un sector bancario que se encuentra más que nunca en tela de juicio.

La bolsa italiana ha sido la peor parada: -5,63 por ciento, seguida por la española -4,88 por ciento, francesa -4,05 por ciento y alemana -2,93 por ciento. Las caídas han sido potenciadas por una serie de resultados corporativos peores de lo esperado, como en el caso de Zurich, Rio Tinto o Socgen.

A las preocupaciones habituales que llevan pesando sobre las bolsas en los últimos tiempos: China, petróleo e incertidumbre política, se le está uniendo una que quizá sea incluso más desestabilizadora. Por su importancia para la economía, el desplome del sector bancario hace suscitar todo tipo de dudas sobre su solvencia y capacidad para canalizar el crédito al resto de la economía, tal y como pretende el BCE.

Tras las caídas, índice europeo Stoxx 600 ya cotiza con un PER estimado de solo 13,5 veces beneficios, cuando el pasado abril este ratio era de 17. Esto podría significar que durante las próximas semanas podríamos asistir a una rebaja generalizada de las previsiones de beneficio de las empresas europeas.

El Ibex acumula una caída del 8,8 por ciento desde el lunes y retorna a los 7.746 puntos. Las mayores caídas las han protagonizado Bankia y BBVA, con descensos de más de siete puntos. La que menos ha caído ha sido Red Eléctrica, que se ha dejado un -2,21 por ciento.

La nota positiva la ha puesto la farmacéutica sueca Meva, que será comprada por Mylan, que pagará una prima del 92 por ciento, respecto al precio de cierre de ayer. La operación asciende a 7.200 Mn$ y se pagará en efectivo y acciones. Este anuncio, unido a los débiles resultados del 4T presentados por Mylan, han provocado caídas superiores al -15% en la americana.

Para no ser menos, el petróleo se ha sumado al desplome. El Brent cedía al cierre de la sesión en Europa dos puntos, hasta los 30,10$, y el West Texas un cuatro por ciento, hasta los 26,30$.

Destaca el movimiento del Banco Central de Suecia, que se anticipa a los que pueda hacer el  BCE en marzo y ha decidido bajar aún los tipos de interés desde -0,35 por ciento hasta el -0,5.

¿A dónde se está yendo el dinero que antes había en bolsa? A deuda pública solvente y al oro. El metal precioso se ha disparado un cuatro por ciento adicional, pasando a cotizar en los 1.250 dólares por onza. Además de por su consideración de activo refugio, el oro se está viendo favorecido por la caída del dólar, su moneda de referencia.

Por su parte, la prima de riesgo española rebasa de nuevo los 160 puntos básicos al cotizar nuestro bono a diez años en el 1,79 por ciento y sobre todo por el descenso en la rentabilidad del bono alemán, ya en 0,18 por ciento.

Aunque más moderadas, Wall Street no se escapa de las caídas, que rondan los dos puntos a unas horas del cierre. Ni siquiera el más que probable retraso en la subida de tipos ni la bajada del dólar (1,135 en su cambio frente al euro) parece estar ayudando a las empresas americanas.

Felipe López-Gálvez/Self Bank