Blanco ha presentado este jueves ante la autoridad laboral un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) por causas económicas y organizativas, que afectará a 332 empleados de diversas áreas, el 26% de la plantilla, y supondrá el cierre de 12 tiendas, según ha anunciado la firma, propiedad del grupo saudí Alhokair.
La compañía, que cuenta con una plantilla total de 1.250 trabajadores y con 121 establecimientos repartidos en España, contempla el fin de la actividad y cierre de una docena de tiendas ubicadas en Alicante, Barcelona, Bilbao, Elche, Ibiza, Madrid, Valencia, San Sebastián, Santander y Santiago de Compostela, con el objetivo de «maximizar eficiencias».
«Todo ello permitirá hacer frente a las necesidades y exigencias del mercado en el momento actual, que estaban afectando seriamente a la empresa y comprometiendo su viabilidad en el futuro», ha subrayado en un comunicado.
Tras la presentación del ERE, se abre un período de consultas que se prolongará durante 30 días naturales.
Durante la primera reunión con los representantes de los trabajadores, que ha tenido lugar este jueves, la dirección de Blanco ha presentado los detalles de las razones de la reestructuración de la compañía y su nueva organización corporativa, fruto del proceso de transformación que se plantea para posicionarse como una empresa «competitiva, eficaz y rentable».
Blanco ha asegurado que inicia este proceso de negociación desde el «más absoluto respeto» a sus trabajadores y con la «mayor transparencia», buscando el diálogo «permanente» con los representantes de los trabajadores con el fin de alcanzar una solución «consensuada».
Precisamente la cadena de moda y los representantes de los trabajadores han iniciado este jueves en Madrid las negociaciones para abordar el ERE, coincidiendo con la reunión de los representantes de Alhokair con los franquiciados internacionales de la firma, según han informado a Europa Press en fuentes sindicales.
A principios del año pasado, el grupo saudí Alhokair adquirió por más de 40 millones de euros la mayor parte de los activos de la cadena textil española Blanco y se comprometió a mantener y asumir los 1.200 puestos de trabajo.
En el auto, al que ha tuvo acceso Europa Press, se destacaba la importancia de la conservación de los empleos, ya que esos despidos generarían un importante volumen de créditos contra la masa derivados de las indemnizaciones laborales de dichos despidos.
Europa Press