España ha captado hoy 2.933 millones de euros en letras a tres y nueve meses, en la parte alta del objetivo, que oscilaba entre 2.000 y 3.000 millones, y de nuevo ha aplicado intereses negativos, es decir, ha cobrado a los inversores por su deuda, si bien en esta ocasión algo menos que en la anterior.
De los 2.933 millones de euros colocados hoy, 1.210 han salido a tres meses con un interés marginal negativo del 0,16 %, ligeramente inferior al aplicado en noviembre, que fue también negativo del 0,225 %; los 1.723,10 millones de euros restantes se han adjudicado a nueve meses con una rentabilidad negativa del 0,002 %, también menor que la del mes anterior (-0,071 %).
La demanda de las entidades se ha elevado a 5.628,2 millones de euros, con lo que la ratio de cobertura, que es la proporción entre las solicitudes y el importe adjudicado, ha alcanzado 1,9 veces.
Se trata de la octava ocasión en la que el Tesoro ha cobrado a los inversores por su deuda a tres meses, y la tercera en la que lo hace a nueve meses.
Esta simbólica subida de la rentabilidad no altera el hecho de que el Tesoro Público sigue cobrando por su deuda y se ha instalado de forma permanente entre los países que cobran por su deuda, como Austria, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Irlanda, Francia, Alemania, Italia y Holanda.
Desde enero, el Tesoro ha captado 136.900 millones de euros -sin contar la subasta indexada a la inflación-, un 98,5 % de la previsión de emisión a medio y largo plazo, que era de 139.000 millones de euros.
Y a un coste medio del 0,85 % a cierre de noviembre de 2015, frente al 1,52 % de diciembre de 2014.
España tiene aún pendiente una última emisión este año, el próximo jueves, de bonos a cinco años y obligaciones con vencimiento en julio de 2023 y julio de 2040, cuyo objetivo oscila, al igual que hoy, entre 2.000 y 3.000 millones de euros.
EFECOM