España ocupa el puesto 32 de los 152 Estados analizados en el informe anual ‘Libertad Económica en el Mundo’. Durante el acto de presentación del informe celebrado este jueves, en el que participó el presidente de CEOE, Juan Rosell, los últimos datos, referidos a 2011, otorgan a España una puntuación de 7,53, por debajo de la media de los países de la OCDE y del núcleo central de los europeos.
El académico del Cato Institute Lorenzo Bernaldo de Quirós se refirió a las dos tareas pendientes que tiene España y dijo que son la reducción del tamaño del Estado y la regulación.

Bernaldo de Quirós dijo que los ajustes que se han hecho desde 2011 dan «la impresión de que sí» han tenido incidencia en dar mayor libertad económica a España en algunos aspectos como la reforma laboral. Por el contrario, indicó que no se han visto esos efectos en el tamaño del Estado, que «no hemos adelgazado», afirmó, y el índice lo puntúa con un 6,15 y lo sitúa en la posición 74 del ranking.

Juan Rosell opinó que la regulación tienen que ser, en cualquier caso, clara. Así, el presidente de la patronal de los empresarios defendió que están a favor de menos legislación pero mejor, ya que apuntó que no puede haber cada año 60 cambios en IRPF y que estén en funcionamiento unas 170.000 leyes. Afirmó contundente que «no podemos hacer leyes porque sí».

Finalmente, señaló que la clave de la salida de la crisis pasa por evaluar bien las situaciones, «sabiendo qué podemos permitirnos y qué podemos ahorrar» y agregó que «lo que no puedan hacer los Estados, que lo haga Europa».

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