La población extranjera que reside en España alcanzó los 5,1 millones de habitantes en 2013, aproximadamente un 11 por ciento del total de la población, lo que le convierte en el segundo país de la UE. Alemania es el primero, en 2013 la población extranjera residente en ese país aumentó en 287.000 habitantes, alcanzando los 7,7 millones. España, sin embargo, disminuyó en los últimos años alcanzando la cifra récord de 5,4 millones en 2010. Por detrás de nuestro país están Reino Unido, Italia y Francia. Estos cinco países representan el 77 por ciento del total de extranjeros que viven en la UE.
El país con mayor porcentaje de extranjeros en la UE es un estado miembro pequeño, Luxemburgo, con un 44,5 por ciento. Chipre alcanza el 19,6 por ciento, Letonia y Estonia un 15,6 por ciento y un 14,9 por ciento respectivamente, Irlanda y Austria rozan el 12 por ciento, y España se sitúa en el 10,9 por ciento, lo que le convierte en uno de los países de la UE con mayor proporción de extranjeros.
Por otro lado, respecto a los países de origen de los extranjeros residentes en España, cerca del 40 por ciento pertenecen a otros estados miembros de la UE, mientras que los restantes son nacionales de países extra-comunitarios. El grupo de mayor peso es el rumano con unos 770.000 ciudadanos, que representan un 15,2 por ciento del total extranjero. Le sigue Marruecos con un 15 por ciento del total, los ciudadanos de Reino Unido son el tercer grupo con un 6,2 por ciento. Entre los cinco que encabezan la lista, se encuentran también Ecuador y Colombia.
Odina Sanz Barnola