La selección española de baloncesto masculino estará en los Juegos Olímpicos de Paris 2024 tras ganar este domingo a Bahamas (86-78) en la final del torneo Preolímpico que se ha disputado en Valencia, y lograr así el billete a unos decimocuartos Juegos Olímpicos en los que buscarán la quinta medalla gracias a un gran esfuerzo colectivo que hizo cumplir el sueño de muchos, entre ellos un Rudy Fernández que hará historia con sus sextos Juegos.
España pidió ser anfitriona y lograrlo fue una primera victoria, ya que La Fonteta empujó a los de Sergio Scariolo en los malos momentos, pocos, de esta final en la que los españoles sacaron su carácter y se mostraron solidarios para imponerse a las figuras NBA de una Bahamas que vio truncarse su sueño del debut olímpico.
Sin derrotas en este torneo, #LaFamilia estará en Paris 2024 al completo, junto a la selección femenina, y buscará una nueva medalla olímpica, la que no pudieron saborear en Tokyo 2020 pero sí en Río 2016 (bronce) y en Londres 2012 y Pekín 2008 (plata). Y lo hará gracias a que se impuso el colectivo a lo individual, a que pudo el ser ‘perro viejo’ y la veteranía a la salvia nueva bahameña. Y con La Fonteta apretando y siendo el sexto hombre.
En el último cuarto, tras jugarlo prácticamente todo, Deandre Ayton tuvo que descansar. El gran referente y la gran estrella bahameña estaba agotado, y España aprovechó para también coger aire pero sin dejar que el rival entrara, a nivel de marcador, en el partido. Usman Garuba y Santi Aldama debían aprovechar esa ausencia de Ayton, pero fue tan breve que no pudieron. Y hubo batalla hasta casi el final.
A falta de 5 minutos, España se mantenía por encima de esa barrera psicológica de los 10 puntos, con un Santi Aldama que dejó claro que él también es un buen jugador NBA y que no está de paseo en la mejor liga del mundo. Ayton puso a 7 a Bahamas, pero el canario metió un triple que levantó de nuevo esa barrera. Y pese a que Bahamas volvió a acercarse a 6 puntos con un triple del prometedor Valdez Edgecombe Jr, todo quedó en un intento de susto. España se sabía superior y no se dejó intimidar ni remontar.
En los momentos importantes, España respondió como bloque, como colectivo. Como pidió el seleccionador, Sergio Scariolo, en la previa del choque. Bahamas fue un digno rival, apretó hasta verse fuera por falta de tiempo, pero España fue mejor. Tiró de defensa, de ataque, de veteranía, de provocación, de las armas de un equipo que sí ha estado en la élite y que seguirá en ella. Buscando una nueva medalla en una gran competición.
Por contra, Bahamas es todavía un melón por abrir. No se sabe, por su poco bagaje y experiencia profesional en la elite, si puede salir bien o mal. Hasta el momento, en Valencia, sus estrellas NBA sortearon bien los escollos y mostraron píldoras de su poderío físico y ofensivo. Así que España no tenía de inicio nada ganado. Para nada. Costó reservar el billete olímpico y más todavía comprarlo definitivamente.
Pero el mayor fondo de armario, la mejor defensa, el saber estar en los momentos clave y la afición que prácticamente llenó La Fonteta fueron algunos de los factores clave que ayudaron a España a ir imponiéndose a su rival a medida que avanzaba el partido. Empezó igualada la cosa, pero en el tercer cuarto España despegó, consciente de que Bahamas podía hundirse moralmente al verse, por ejemplo, 14 puntos abajo (61-47) a poco de la conclusión del tercer parcial.
Aún así, la ilusión de la gran estrella bahameña, el pívot de los Portland Trail Blazers de la NBA Deandre Ayton, de estar en París mantuvo a los isleños en el partido. El interior fue Bahamas, casi todas las bolas calientes pasaban por sus manos y tuvo mucho mérito su partido, enfrentándose casi solo en la pintura a Santi Aldama, Willy Hernangómez, Usman Garuba y compañía.
Se empezó el último cuarto con una ventaja aparentemente cómoda de +9 puntos (65-56), la misma con la que España llegó al descanso tras una gran primera parte tanto a nivel defensivo, con Garuba y López-Arostegui dándolo todo para frenar a Hield y Ayton, como ofensivo, con aparición estelar de un Lorenzo Brown que metió tres triples casi seguidos para dar alas a los españoles.
Y Brown apareció también en los minutos finales, acertado desde la distancia y para ser designado el ‘MVP’ de la final, aunque Santi Aldama fue nombrado mejor jugador del torneo. Y la combinación entre el triple de Brown y la magia de Santi Aldama en la pintura, sumado al mejor físico gracias al más amplio fondo de armario que tuvo el equipo anfitrión.
Así se selló la victoria, el billete olímpico y que España esté en Paris 2024. En Francia buscarán una quinta medalla olímpica y Rudy Fernández, autor de 9 puntos esta noche y animador de La Fontata cuando hizo falta, hará historia con sus sextos Juegos Olímpicos, siendo el único jugador de baloncesto masculino en lograrlo.