La Comisión Europea y el Banco Central Europeo han vuelto a poner en relieve los “desequilibrios significativos” en materias como el paro y la elevada deuda y han pedido nuevamente al ejecutivo de Mariano Rajoy que continúe con las reformas en marcha y aplique “medidas adicionales” para reducir la diferencia entre trabajadores indefinidos y temporales.
Estas nuevas recomendaciones nacen de la última visita de los inspectores del BCE y Bruselas a la capital del país tras finalizar el programa de rescate bancario en el que España recibió 41.300 millones de euros de los socios de la Unión.
«En conjunto, España se está beneficiando de las reformas estructurales realizadas, la consolidación fiscal y la recapitalización bancaria, que se reflejan de forma creciente en la estabilización del sector financiero, una fuerte recuperación económica y una baja prima de riesgo», han señalado los inspectores en una declaración conjunta con las conclusiones de su visita.
Bruselas ha respaldado los datos que apuntan a una recuperación de la economía española a finales de 2014, incluso siendo superior a la media de la zona euro. Sin embargo, los inspectores europeos han recalcado en su informe del alto porcentaje del paro juvenil y de larga duración. Además han señalado nuevamente que «la deuda pública sigue aumentado y devolverla al valor de referencia del 60% requerirá un esfuerzo fiscal continuado a largo plazo».
La reestructuración bancaria progresa adecuadamente
Bruselas y BCE han calificado de positiva la reestructuración de los bancos españoles y que aquellos que han recibido ayudas públicas están realizando buenos progresos. No obstante, en el informe los expertos señalan que la estabilización no es uniforme entre todas las instituciones financieras del sector.
«Completar la reestructuración y privatización de los bancos de propiedad estatal es necesario para poner al sector bancario en una base sólida a largo plazo», concluyen los inspectores. Su próxima visita de vigilancia tendrá lugar en otoño de 2015.