La empresa tecnológica y de innovación sostenible se ha visto obligada a anunciar un preconcurso de acreedores que durará cuatro meses
La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ha aprovechado la presencia de los medios de comunicación antes de la presentación de un libro sobre empleo para mandar un “mensaje de tranquilidad” por parte del gobierno de España ante el preconcurso de acreedores que ha anunciado hoy la multinacional española.
Al ser cuestionada sobre el tema la miembro del ejecutivo ha pedido a la empresa “diálogo y negociación” para buscar al conflicto y “entre todos una buena solución”. Todo ello para “seguir manteniendo una gran multinacional española que siga creando riqueza, pero sobre todo que se siga manteniendo el empleo”.
Este último punto –el empleo- es el que más preocupa a Báñez y en este sentido ha llegado a afirmar: “A nosotros, por supuesto, nos preocupan los trabajadores y entre todos estoy segura de que se va a buscar una solución que siga manteniendo el empleo y la empresa traiga en el futuro riqueza y oportunidades”.
Las acciones por los suelos
Esta situación ha llevado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) a suspender durante las primeras horas de la mañana la cotización de las acciones de tipo B de la compañía en la bolsa de Madrid –hasta las 11.00 de la mañana-.
Sin embargo, y ante el aluvión de peticiones de venta, solo han podido mantenerse durante unos segundos en el mercado para volver a ser otra vez inhibidas durante otra hora y media más. Durante este tiempo, su cotización descendió un 70 por ciento respecto a la jornada de ayer y a las 12:30 se tasaban en solamente 0,281 euros.
La empresa del Manchester
Abengoa es una empresa que se encarga de ofrecer soluciones tecnológicas innovadoras, basadas en un desarrollo sostenible y entre otros patrocina y da soporte a clientes tan importantes como el club de fútbol inglés, Manchester United,-del que es Official Sustainable Tecnology Partner– según aparece en su portal web.
Ahora Abengoa, ha entrado en un preconcurso de acreedores, azotada por su deuda que llega a los 6.238 millones de euros en su valor neto y a los 8.791 millones brutos. La compañía se ve obligada a convocar este preconcurso –en el que tendrá que llegar a un acuerdo con sus acreedores- ante la negativa final de Gestamp de entrar en el capital de la multinacional tecnológica por falta de acuerdo en las condiciones.
Diario Financiero (DF)
