La Unión Progresista de Fiscales (UPF) pidió este jueves al Gobierno que reforme la Ley de Enjuiciamiento Criminal para que la Fiscalía pueda instruir con eficacia las investigaciones sobre los casos de corrupción.

El portavoz de la UPF, Álvaro García, valoraba así, en declaraciones a Servimedia, la intervención en la Comisión Constitucional del Congreso del fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, que alertó de la dificultad de investigar de forma adecuada los casos de corrupción debido a la falta de medios en los juzgados.A este respecto, García señaló que a largo plazo es necesaria una modificación de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, «una reforma que no se ha hecho en toda la historia de la democracia».

Los fiscales progresistas señalan que «se debe dotar de medios» al Ministerio Fiscal con la incorporación de nuevos fiscales anticorrupción, la promoción de plazas y la incorporación de más técnicos de Hacienda y de la Administración del Estado, así como agentes de policía especializados.García también apuntó que se necesitan «modificaciones normativas que permitan al fiscal realizar algunas diligencias», como seguir el rastro del dinero o actuar con urgencia antes de judicializar un proceso. El objetivo es «tener un sistema procesal ágil, rápido y dinámico, encabezado en la investigación e instrucción por los fiscales».

MEDIDAS ASUMIBLES

El portavoz de la UPF dijo que el Gobierno debe «tomar nota» de las declaraciones en el Congreso de Torres-Dulce. Para García, las medidas que plantean «son asumibles» por el Ministerio de Justicia, pero «vamos al revés», ya que «se crean plazas de fiscales testimoniales, se quita a sustitutos y se bajan las retribuciones».

«La realidad es que las plantillas de fiscales cada vez tenemos más trabajo y la delincuencia compleja exige especialización y muchísimo trabajo», aseguró.García también valoró las palabras del fiscal general del Estado sobre la percepción ciudadana de que la justicia no trata igual a ricos y pobres.

El portavoz de la UPF señaló al respecto que «el rico se defiende mejor que quien no tiene recursos», y para «contrarrestar esto debemos tener la capacidad de actuar mejor en procesos de investigación».

Los fiscales progresistas aseguran que los delitos relacionados con la corrupción exigen armas «muy poderosas», porque en muchos casos se tiene «la capacidad de esconder el dinero» y «es normal» que la ciudadanía tenga la sensación de que no se persigue a los ricos.García concluyó que para perseguir la corrupción «el voluntarismo no es suficiente, hacen falta instrumentos que cuestan dinero y hay que gastar, porque nos jugamos la credibilidad nacional».

Fuente: Servimedia