La consolidación fiscal en España ha experimentado en el año 2013 una mejora sustancial gracias al apoyo de las instituciones europeas, a la incipiente recuperación de la economía española y al esfuerzo de ajuste de todos los niveles de gobierno. Sin embargo, el cumplimiento de los objetivos contemplados en el Programa de Estabilidad 2014-2017 requerirá medidas adicionales. Esta es la conclusión de Santiago Lago en el último número de Cuadernos de Información Económica, editada por la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas).
Lago identifica algunos factores que dificultan el proceso de consolidación fiscal. Entre ellos cita las elevadas previsiones de crecimiento económico para los años 2016 y 2017, la tendencia al alza del gasto en pensiones, las dificultades para seguir rebajando el gasto autonómico y del riesgo de que se aplacen ajustes comprometidos por parte de las administraciones locales y autonómicas por la proximidad de las elecciones de 2015.
Joaquín Maudos analiza la relación entre el tamaño empresarial y el acceso a la financiación y pone de manifiesto que las pequeñas y medianas empresas españolas pagan 229 puntos básicos más por financiarse que las grandes empresas, la mayor diferencia de toda la zona euro. Su conclusión es que es necesario poner en marchas medidas específicas para mejorar el acceso a la financiación de las pymes, ya que de ellas depende un elevado porcentaje de la producción y el empleo.
Santiago Carbó y Francisco Rodríguez comparan los procesos de reestructuración financiera que han tenido lugar en la Unión Europea y concluyen que la intensidad del proceso vivido en España puede explicar las ventajas competitivas que están surgiendo en nuestro sector bancario. La reestructuración ha permitido a las entidades españolas mejorar sus resultados y su eficiencia en comparación con otros sectores bancarios europeos.
El ajuste salarial que ha tenido lugar en España durante la crisis es estudiado por Daniel Fernández Kranz. El autor concluye que ese ajuste ha sido desigual y ha afectado en mayor medida a los trabajadores remuneración más alta antes de la crisis, también los de mayor edad y superior nivel de formación y a los empleados del sector público. Por sectores, el ajuste ha sido más intenso en la construcción y en las comunidades autónomas en las que el paro ha crecido más. Los salarios han bajado más en las grandes empresas que en las pequeñas y medianas y el ajuste ha sido mayor para los trabajadores con contrato temporal.