El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha aclarado este viernes que no es que rechace el permiso por fallecimiento de hasta 10 días anunciado por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, sino las «formas» que utiliza: hacer anuncios «para hacer su propia campaña personal» sin pasar por el diálogo social.

«Yo no me estoy quejando del fondo de los asuntos (…) Lo que creo es que está utilizando el Ministerio de Trabajo para hacer su propia campaña personal, porque es así. Entonces, cuando el Parlamento no le da la razón, pues empieza a dar noticias, empieza a hacer, a intentar hacer ordenamientos que se hacían antes de la muerte de Franco para trufar lo que es el tema laboral», ha señalado Garamendi en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press.

Así, sobre el permiso de fallecimiento de 10 días anunciado ayer por Díaz en los ‘Desayunos Informativos de Europa Press’, Garamendi ha afirmado que la ministra empezó a dar noticias en ese foro «sin anunciarlo al propio Gobierno, a sus propios socios, o ir al diálogo social a plantearlo».

«Yo de lo que me quejo es de cómo se gestiona esto, saltándose a la torera el diálogo social. Por eso digo que al final necesitamos un descanso de este espacio. No tiene nada que ver con que ahora diga, no me creo tan mala persona, que es que no quiero que nadie pueda llorar a sus fallecidos. Yo no estoy hablando de ese término. Se buscan espacios populistas para intentar atacar a la persona. Ya se me ha llamado machista varias veces. El ministro Cuerpo ha dicho que lo lógico sería ir a la mesa de diálogo social, hablar con los sindicatos, con los trabajadores, con los empresarios, pues a ver esto cómo se puede hacer. Espero que no le pongan otra vez la matrícula de mala persona», ha señalado.

Garamendi ha asegurado que, «en cuanto a algo no les gusta, descalifican en lo personal». «Creo que sinceramente no me lo merezco y que no vale decir que yo estoy de acuerdo con que alguien pueda fallecer su padre, su madre y resulta que es que tiene que ir a trabajar. Nadie ha dicho eso. Yo no estoy hablando de eso. Yo estoy hablando exactamente de cómo está reaccionando el Ministerio, muy poco democráticamente, saltándose muchas normas e intentando trufar a base de reales órdenes, es decir, evitando el Parlamento, para hacer su propia campaña política», ha precisado.

Pese a todo, el presidente de la CEOE ha indicado que no dirá nunca que el diálogo social está muerto. «Ayer mismo, en sentido contrario, tuve una reunión, que estamos trabajando intensamente, con la ministra de Seguridad Social, Elma Saiz, para trabajar todo lo que es la incapacidad temporal, lo que son las bajas (…) Son dos formas de trabajar. Es decir, en un lado vamos a dar noticias, voy a dar mítines, y en el otro lado, y lo tengo que agradecer en este caso a la ministra Elma Saiz, es vamos a ver cómo trabajamos, cómo podemos llegar a un acuerdo, vamos a ver con los sindicatos cómo se puede gestionar esto», ha indicado.

Garamendi ha apuntado que, sobre el permiso por fallecimiento de hasta 10 días anunciado por Díaz, «no sabe de qué va ni de qué grado de consanguinidad se está hablando o no se está hablando». «No sabemos porque no se sabe. Normalmente cuando hay una norma se suele hacer una memoria económica. No sabemos nada. Pues nos sentamos y lo hablamos, se ve, se mira, se estudia pero es que no consiste en meter debates para llenar. A mí esto es un tema que me gustaría hablar con los sindicatos para evaluar exactamente de qué estamos hablando», ha subrayado.

DICE QUE SUS PALABRAS SOBRE ALCARAZ «SE SACARON DE QUICIO»

Sobre la rebaja de la jornada hasta las 37,5 horas semanales, que fue tumbada por el Congreso, Garamendi ha afirmado que «nadie está discutiendo» que no se reduzca el tiempo de trabajo, pero ha insistido en que ésta es una materia que «desde hace 50 años» se negocia con los sindicatos en las mesas de los convenios colectivos.

Es más, el líder de la patronal ha explicado que la media de jornada semanal en los convenios colectivos es de 38 horas y media, de 40, y ha indicado que cuando se habla de la reducción de jornada se habla de horas al año, no a la semana, «porque luego se distribuyen de manera diferente en función de las necesidades de los sectores y de las empresas».

«Yo no estoy diciendo en ningún caso que no se pueda hablar de esto. De hecho se habla y de hecho en los convenios normalmente de lo que se habla es de salarios y de reducción de jornada y hay 4.500 convenios en España que están abiertos», ha apuntado.

Sobre sus declaraciones afirmando que el tenista Carlos Alcaraz no trabaja 37,5 horas a la semana, sino más, Garamendi ha indicado que «no cree que se metiera en un jardín» por defender la cultura del esfuerzo, que es la que tienen las empresas.

Cuando hablo de un tenista, en este caso de éxito, puedo hablar de los 800.000 tenistas que no son él o de deportistas que están haciendo su esfuerzo o de miles de autónomos donde el tema de trabajar menos para vivir mejor no es su máxima. Yo la cultura de esfuerzo voy a seguir hablando de ella. Volvemos a sacar de quicio una frase cuando lo que he querido poner en valor es que a través del esfuerzo hay gente que triunfa, pero también hay mucha gente que a través del esfuerzo pues, tristemente, no le va bien», ha añadido.

«Cuando un señor ha hecho una oposición, por ejemplo, para ser funcionario pues ha hecho un esfuerzo y cuando un médico ha hecho el MIR para estar en un hospital ha hecho un esfuerzo y cuando un señor ha ahorrado o ha pedido un crédito y ha abierto un bar con su familia pues está haciendo un esfuerzo», ha señalado Garamendi, que ha añadido que no es un «retrógrado» por decir eso, ni pretende descalificar a nada ni a nadie.

«Lo que no me gusta es que nos descalifiquen a los que podemos pensar que esto es así, es parte de la vida y yo lo veo con normalidad. No quiero dar ninguna lección a nadie», ha señalado.

Sobre la reforma laboral, el presidente de la CEOE ha afirmado que la patronal la apoyó «sin fisuras» y que el PP se equivocó al votar en contra. Ahora bien, ha indicado que no la hubieran firmado si hubieran sabido que el Gobierno, 15 días después, cediera ante el PNV y diera prioridad a los convenios autonómicos sobre los nacionales y de empresa.

SMI Y SALARIOS

Sobre la posibilidad de que el salario mínimo interprofesional (SMI) pueda revisarse cada seis meses, Garamendi ha recordado que el SMI es una facultad del Gobierno, pero sí que ha indicado que lo que se está trasladando «permanentemente» a las empresas es una incertidumbre y una inseguridad jurídica «enorme».

Para Garamendi, el debate sobre si Hacienda cobra o no cobra por el SMI es «bastante incomprensible». «Habrá una norma que Hacienda marca y si no, pues que cambien las normas, pero para todo el mundo, no porque ahora le venga bien a la ministra si es así o no es así. Las leyes están para cumplirse», ha añadido.

El presidente de la CEOE ha indicado que aunque los datos macro van bien (estima un crecimiento del 2,5% para este año), «a la gente le cuesta llegar a fin de mes».

En este sentido, ha afirmado que si fuera por la patronal, los salarios «hubieran subido en una medida bastante mayor de la que están», pero el problema es que la Seguridad Social o los impuestos «se lo están llevando».

«El Estado recauda, no para. Estamos en récord de recaudación y eso yo creo que afecta a que cuando muchas veces mi salario no llega, pero es que el coste salarial se ha disparado, es decir el coste que le cuesta a un autónomo, que le cuesta a un pequeño empresario pagar a su trabajador, se ha disparado enormemente. Si ese coste de impuestos no se hubiera disparado, eso estaría en el bolsillo del ciudadano», ha señalado.