“Falta voluntad política”. Así ha declarado Carlos Cruzado, presidente de Gestha, su inconformidad con la actuación del gobierno respecto al control sobre el fraude. Desde el Sindicato de Técnicos de Hacienda opinan que “hay que darle una vuelta a la agencia tributaria” ya que los datos publicados en 2013 sobre la lucha contra el fraude “por primera vez en la historia de la Agencia Tributaria son inferiores en 1.000 millones en referencia a los datos de 2012”.
“La agencia tributaria tiene una forma de actuar volcada en un control sobre los controlados”, asevera el presidente de Gestha en referencia al porcentaje de esfuerzo invertido en el control de pequeñas empresas comparado con el de grandes empresas “donde el esfuerzo es mínimo”. De este modo añade que “esto pone de manifiesto que prima la cantidad a la calidad en el trabajo de la Agencia Tributaria” por lo que propone “hacer un mayor esfuerzo en la investigación de las bases no declaradas”.
El presidente de Gestha también opina que las medidas para reducir el déficit “sin duda están recayendo sobre todo sobre las clases medias” Cruzado lo ejemplifica con los tipos de efectivos sobre impuestos de sociedades donde “los grandes grupos están pagando un 3,5% sobre el beneficio contable mientras que las pymes están pagando un porcentaje bastante mayor”.
Carlos Cruzado también se muestra muy crítico con el informe Lagares ya que “el sistema fiscal es injusto” y esto es algo que debería tenerse en cuenta en esta reforma: “traspasar la imposición directa a la indirecta no va en esa línea de hacer un sistema más equitativo” , asegura. Tampoco se muestra conforme con que en las 440 páginas del informe en ningún momento, salvo en una nota a pie de página, se cita el artículo 31.1 de la Constitución, en el que se establece que todos deberán contribuir al sostenimiento en los gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica: “entendemos que es un déficit importante del texto”.