El desarrollo comercial de cualquier empresa entraña una serie de peligros que se deben tener en cuenta para evitar problemas. Uno de ellos es el riesgo comercial, del que se va a hablar en este artículo. Además, se mostrarán algunas soluciones para reducirlo al máximo y hacer más segura la aventura empresarial sin que se pierda competitividad.
Gestión del riesgo comercial en las empresas
¿Qué es el riesgo comercial? Se trata de la posibilidad de que una empresa no sea capaz de hacer frente a sus obligaciones a corto plazo o de que no logre sus objetivos comerciales.
Los factores desencadenantes de esta situación pueden ser tanto internos como externos. Es cierto que para ganar dinero es necesario correr riesgos. No obstante, no conviene hacerlo sin una gestión adecuada, puesto que puede suponer el fin del negocio.
Lo que sí está en cualquier mano es controlar el nivel de riesgo que se desea alcanzar para controlar el riesgo comercial en las empresas. Hay que tener en cuenta que se debe encontrar un balance adecuado entre el crecimiento de la empresa y su sostenibilidad en el futuro. Esto último siempre debe ser una prioridad y se debe garantizar que ocurra.
Se van a mostrar algunas estrategias que se pueden emplear:
Diversificar el riesgo. Si se puede, lo mejor es que no se dependa nunca demasiado de un solo cliente, y lo mismo se puede aplicar a los diferentes mercados. Así, si una crisis se ceba especialmente con un país o región, es posible que en otro sitio la situación sea distinta.
Analizar la situación de cada cliente. Antes de negociar un contrato con cualquier otra empresa es crucial que se analice su riesgo crediticio. De esa forma, se será capaz de establecer un límite adecuado a las transacciones y se evitará acumular demasiadas facturas sin pagar con una única empresa.
Llevar a cabo una gestión del riesgo comercial prudente. Tener demasiada deuda puede convertirse en un problema si el flujo de caja disminuye y se queda sin liquidez. Por tanto, aunque el crecimiento del negocio sea menor, lo más adecuado es evitar en lo posible el exceso de pasivo.
Seguro cliente de riesgo
Otro de los consejos para controlar el riesgo comercial consiste en disponer de un seguro de clientes, como el ofrecido por Pouey International, grupo internacional con más de 140 años de historia. Su servicio Serenitas es una solución que permite asegurar a los clientes caso por caso, es decir, no necesariamente el conjunto de la cartera de clientes de una empresa. La indemnización acordada corresponde al 100 % de la cantidad garantizada, por tanto, no hay que preocuparse de los impagos, ya que se recuperará siempre el 100 % de las facturas.
Esta herramienta ofrece de 3.000 euros hasta 300.000 euros de riesgo comercial por cliente y funciona como complemento al seguro de crédito preexistente que se aplica a casos individualizados (tanto los localizados en España como en el extranjero). Se trata de una garantía complementaria, al que se añade para completar el cuadro los informes a medida sobre la solvencia de las empresas.
Además, se disfrutará del asesoramiento de un equipo experto que ayudará a conocer la situación financiera de las empresas con las que se trabajan, para neutralizar la incertidumbre y controlar la situación real de cada cliente, cada proveedor y cada socio.
Ya se ha visto el impacto del riesgo en el desarrollo comercial del negocio. En Pouey International ayudarán a controlarlo y ofrecerán soluciones si los clientes dejan de abonar sus facturas. No hay que esperar más y ponerse en contacto con ellos para recibir la ayuda que se necesita.