La Presidencia Federal de Izquierda Unida decidió este viernes expulsar de la coalición a los portavoces en la Asamblea de Madrid, Gregorio Gordo, y en el Ayuntamiento de la capital, Ángel Pérez, por «falta muy grave» al desoír las resoluciones anteriores en las que se les pedía abandonar esos cargos.

El resultado del expediente disciplinario abierto contra ambos fue aprobado con 31 votos a favor, ninguno en contra y dos abstenciones. Doce de las personas asistentes a la reunión decidieron no participar en la votación.

Las instructoras del expediente, Henar Moreno y Amanda Meyer, propusieron la expulsión de Gordo y Pérez por falta muy grave recogida en el artículo 31.4 de los estatutos federales de Izquierda Unida, por «actuación en contra de los acuerdos, decisiones o resoluciones expresamente adoptados por los órganos de la organización en el marco de sus competencias con consecuencias negativas para IU».

La última resolución de la Presidencia Federal que dio pie a esta actuación disciplinaria consideraba «inaceptable» el comportamiento de Gordo y Pérez y aprobó por ello desautorizarlos políticamente y abrir el expediente. Sin embargo, la expulsión de la coalición no puede privar a Gordo y Pérez de sus actas y sus escaños en la Asamblea y en el Ayuntamiento, y está por ver que ambos acaten la resolución de la dirección federal de IU.

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