El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, está citado a comparecer este martes en el Congreso, en su primer encuentro con los parlamentarios desde que CaixaBank se hiciera con Bankia, una operación aplaudida por el supervisor financiero, que reconoce más margen para otras fusiones bancarias.
La comparecencia está prevista a partir de las 11.00 horas ante la Comisión de Asuntos Económicos y Transformación Digital, a la que acude para presentar el Informe Anual del organismo que dirige.
Sin embargo, la de Hernández de Cos será la primera comparecencia de una institución relacionada con el sector financiero tras conocerse a principios de septiembre las negociaciones entabladas entre Bankia y CaixaBank de unirse para formar el primer banco del país, en términos de volumen de negocio y número de empleados y sucursales.
Lo hará además un día después de que Unicaja y Liberbank confirmen contactos «preliminares» para abordar una posible fusión. Además de estas dos sociedades, Abanca o Ibercaja son otras de las entidades que figuran en las quinielas de posibles movimientos corporativos en España.
Tras conocer la operación entre CaixaBank y Bankia, ERC, Junts, EH-Bildu, la CUP, Más País-Equo, Compromís y el BNG reclamaron a la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, que compareciera ante el Pleno del Congreso para informar de esta concentración, que rebajaría la participación del Estado en la nueva entidad del 60% que tenía en Bankia al 16% en la nueva CaixaBank, tras invertir 24.000 millones en su rescate.
OPERACIONES ANTE UNA RENTABILIDAD REDUCIDA
Desde el inicio de su mandato, el gobernador del Banco España ha venido incidiendo en la reducida rentabilidad del sector bancario y en la necesidad de invertir en más tecnología y digitalización, señalando que las operaciones de consolidación pueden facilitar estos objetivos.
Ante la fusión, De Cos ha asegurado que su papel será el de «analizar la viabilidad de la operación y vigilar la adecuada ejecución» de la misma «frente a objetivos de política pública», pues su mandato es el de velar por la estabilidad financiera.
En todo caso, el gobernador ha subrayado que considera que existe «margen» para nuevas operaciones de concentración, si bien es partidario de operaciones transfronterizas europeas, con más incentivos por parte de las autoridades comunitarias.