Iberdrola ha sido incluida hoy, un año más, en el prestigioso Índice Dow Jones de Sostenibilidad (DJSI), el indicador global de referencia para medir la aportación de las empresas al desarrollo sostenible. La compañía ha conseguido una puntuación global de 87 puntos en la edición 2018.
Gracias a una acertada estrategia uno de cuyos pilares básicos es la sostenibilidad, Iberdrola continúa fortaleciendo su posición de liderazgo en las áreas Gestión ambiental; Innovación; Creación de oportunidades de negocio; Gestión de la cadena de suministros y Reporte social y ambiental.
El DJSI ha reconocido a Iberdrola, dentro del sector utilities, por sus políticas enfocadas a, entre otros objetivos, luchar contra el cambio climático; invertir en energías renovables; desarrollar el capital humano; implicarse con los grupos de interés y atraer y retener el talento,.
La empresa ha logrado estar de nuevo entre las 15 eléctricas más sostenibles del mundo por un enfoque estratégico basado en el desarrollo de las energías renovables y es una de las cuatro utilities que en esta edición está presente tanto en el DJSI World como en el DJSI Europe -junto a REE, EDP y Terna-.
Iberdrola ya cuenta con casi 29.500 megavatios (MW) de capacidad mediante fuentes renovables de generación eléctrica y es un líder eólico mundial, con más de 16.000 MW de potencia instalada, tanto terrestre como marina.
Cabe destacar que Iberdrola es la única compañía eléctrica europea que ha sido incluida en las 19 ediciones del DJSI, clara muestra de su firme compromiso con la sostenibilidad y su estrategia, que sabe dar respuesta a los principales retos económicos, ambientales y sociales de la política energética internacional.
Contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)
Iberdrola ha incorporado los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), definidos por Naciones Unidas para el horizonte 2015-2030, a su estrategia empresarial y a su política de sostenibilidad, y es un referente por su contribución directa a los objetivos globales, destacando sus aportaciones en el campo de la energía y el cambio climático.
En este sentido, la empresa enfoca sus esfuerzos al suministro de energía segura, sostenible y no contaminante, lo que le ha convertido en un líder mundial en la tecnología eólica. Además, promueve el programa Electricidad para Todos, a través del cual ya se ha dado acceso a la energía eléctrica a más de cuatro millones personas en países en desarrollo y que tiene como objetivo alcanzar los 16 millones en 2030.
Por otro lado, Iberdrola siempre ha mostrado su compromiso con la reducción de emisiones para combatir el cambio climático y avanzar hacia la descarbonización de la economía. La empresa se ha fijado como nuevo objetivo medioambiental lograr en 2030 una reducción del 50% de su intensidad de emisiones de CO2 sobre los niveles de 2007 y ser neutra en carbono en 2050.
Por las características de su mix de generación, su perfil de inversiones y los compromisos asumidos, Iberdrola es un actor clave en la contribución del sector eléctrico a la descarbonización de la economía mundial y en la consecución del objetivo de no superar un incremento de 2oC en la temperatura global a final de siglo con respecto a los niveles preindustriales.