Iberpapel ha alcanzado en el primer semestre de 2021 un beneficio neto de 7,10 millones de euros, cifra que supera en un 67% el resultado del ejercicio 2020 al completo, que fue de 4,24 millones de euros, según ha anunciado la empresa.
Además, el importe neto de la cifra de negocio fue de 106,42 millones de euros, un 21,6% superior a lo registrado en el mismo periodo del año anterior, y su Ebitda ascendió hasta los 14,30 millones de euros.
El análisis de estos números apunta a que el negocio de Iberpapel ha mantenido una tendencia positiva en estos seis primeros meses del año, sobre todo en los meses de abril a junio, donde se observa ya una evolución más positiva.
Es destacable el aumento en unidades físicas vendidas, un 27% más que en 2020, y un 4% por encima de lo registrado en 2019 y 2018, lo que, unido a una recuperación de su precio de venta, todavía en niveles significativamente inferiores al precio de 2020, se tradujo en un aumento de las ventas del papel del 18%, hasta los 84,6 millones de euros.
También la facturación del negocio de energía eléctrica se incrementó, en este caso en un 23%, gracias al aumento de la producción y del precio de la energía.
Teniendo en cuenta la buena marcha de la compañía, la Junta General de Accionistas acordó distribuir un dividendo complementario y definitivo del resultado del ejercicio 2020 de 0,10 euros brutos por acción, que se hizo efectivo el pasado 15 de julio.