Para disminuir los efectos del Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que llevará a cabo sobre 1.850 empleados, Indra plantea recolocar a unos 100 trabajadores y una rebaja en el salario de otros 150.

Esta medida no acaba de conformar a los representantes de los trabajadores, que han pedido que incorpore un plus de voluntariedad para limitar los despidos traumáticos, algo a lo que la empresa se ha comprometido a estudiar.

Asimismo, la compañía ha propuesto indemnizar con 33 días por año y un límite de 14 mensualidades a aquellos afectados por el despido colectivo, aunque los sindicatos consideran esta propuesta “insuficiente”.

Del mismo modo, la empresa ha ampliado el número de trabajadores incluidos en las prejubilaciones, incluyendo a los profesionales que hayan cumplido 57 años o más a 31 de diciembre de este año y no hayan alcanzado los 63 a extinción de su contrato.

Los sindicatos han presentado una nueva propuesta de medidas “siempre condicionada” por las pérdidas registradas en 2014 y el primer semestre de 2015. Pero parece que las noticias no serán buenas para el colectivo de trabajadores porque la compañía anunció ayer pérdidas de 436 millones de euros en el primer semestre del año frente al beneficio de 60 millones en el mismo periodo de 2014.

Yasmina Pena