El precio será de 8,9 euros por kilovatio y 15,3 para las potencias inferiores a 15 kilovatios

El Ministerio de Industria ha creado un impuesto para aquellos consumidores que utilizan baterías como las de Tesla para su propio abastecimiento. Lo recoge el borrador del real decreto, el cual manifiesta que estos consumidores no podrán emplear este tipo de baterías y serán penalizados aquellos cuyos sistemas de almacenamiento ya están incorporados en los nuevos paneles solares.

Solo las podrán utilizar aquellas personas que no se conecten a la red eléctrica y dispongan de una instalación aislada.

La carga solo se aplica sobre la potencia y oscilará entre los 8,9 euros por kilovatio (kW) y los 15,3 euros por kilovatio para las potencias inferiores a los 15 kW conectadas en baja presión. Sin embargo, sí que permitirá a los consumidores conectadas en alta tensión y que realicen actividades empresariales hacerse con una retribución por verter la electricidad que no puede ser consumida en su propia instalación, aunque este permiso  está sujeto a condiciones.

A estos últimos se les permitirá implantar sistemas de ahorro y eficiencia si los generadores y las baterías de almacenamiento quedan también excluidos.

Lo mismo pasa con los autoconsumidores, que podrán verter a la red la electricidad excedentaria sin tener contraprestación económica alguna.