El fabricante británico de vehículos Jaguar Land Rover se anotó unas pérdidas después de impuestos de 667 millones de libras (unos 784 millones de euros al cambio actual) en los dos primeros trimestres de su año fiscal (de abril a septiembre), un 25,6% más, en comparación con los 531 millones de libras (624 millones de euros) que perdió en el mismo periodo de 2020.
Además, las pérdidas antes de impuestos fueron 412 millones de libras (unos 484 millones de euros), un 18,4% más en comparación con los 348 millones de libras (409 millones de euros) que perdió un año antes.
Solo en su segundo trimestre, Jaguar Land Rover se anotó unas pérdidas después de impuestos de 381 millones de libras (448 millones de euros), en comparación con las 117 millones de libras (137 millones de euros) que ganó en el mismo trimestre de 2020.
De la misma forma, la facturación de la firma cayó un 11,05% en este trimestre, hasta 3.871 millones de libras (4.551 millones de euros), cuando en 2020 logró una cifra de negocio de 4.352 millones (5.116 millones de euros).
Asimismo, contabilizó pérdidas antes de impuestos de 302 millones de libras (unos 355 millones de euros al cambio actual) en su segundo trimestre en comparación con las 65 millones de libras (76 millones de euros) que ganó un año antes.