Las autoridades de Japón han mostrado su desaprobación a una serie de maniobras militares del Ejército ruso en las islas Kuriles, un archipiélago entre Japón y la península rusa de Kamchatka en disputa por ambas naciones desde mediados del siglo pasado.
Si bien Moscú tiene dominio sobre la totalidad de las islas, Tokio reclama la soberanía sobre cuatro de ellas, las más meridionales y próximas a su territorio, a las que denomina Territorios del Norte. El conflicto se remonta a 1952, cuando, tras la Segunda Guerra Mundial, Moscú se anexionó la totalidad de los islotes.
«La expansión militar de Rusia en los Territorios del Norte es inaceptable porque va en contra de la posición de nuestro país con respecto a esas islas», ha lamentado el portavoz del Ejecutivo japonés, Hirokazu Matsuno, según la agencia nipona Jiji Press.
En el marco de la invasión rusa a Ucrania, Japón anunció una batería de sanciones contra Rusia. Tras esto, Moscú declaró el fin de las negociaciones para alcanzar un tratado de paz entre ambas naciones, pendiente desde la Segunda Guerra Mundial, y también del diálogo para el establecimiento de actividades económicas conjuntas en las Kuriles.