José Ramón Freire: «Las prestaciones de un vehículo que funciona con gas y otro que lo hace con combustibles convencionales son idénticas»

El Director de Soluciones de Movilidad de GAS NATURAL FENOSA ha hablado con Diario Financiero

La apuesta de José Ramón Freire por el gas natural vehicular viene de lejos. El director de Soluciones de Movilidad de Gas Natural Fenosa y Presidente de Gasnam (Asociación Española de Gas Natural para la Movilidad) se ha convertido en el artífice de que las Administraciones estén trabajando “intensamente” para normalizar el uso de un combustible que además de respetar el medioambiente supone un ahorro de hasta el 50 por ciento

¿Cómo surge su apuesta por el gas natural como combustible para vehículos?

Aunque en España el gas natural como combustible de automoción es relativamente poco conocido, en muchos otros países, su uso está muy extendido. Es el caso de Alemania o Italia, país en el que circulan 700.000 vehículos que funcionan con gas. En todo el mundo existen más de 20 millones de automóviles que consumen gas natural, lo que demuestra que es una tecnología madura y contrastada.

¿Qué ventajas aporta el GNV respecto a otros combustibles?

El gas natural tiene ventajas de dos tipos. Las primeras, las medioambientales: disminuye de forma sustancial la contaminación del transporte, un problema creciente en las ciudades y en la que las Administraciones, tanto comunitarias como locales, están trabajando intensamente. El gas natural vehicular reduce en más de un 85 por ciento las emisiones de óxidos de nitrógeno y en casi el 100 por ciento las partículas en suspensión, principales agentes que afectan a la salud humana. La segunda tiene que ver con el ahorro, ya que es el 50 por ciento más barato que la gasolina y el 30 por ciento más que el gasóleo por kilometro recorrido.

Las grandes ciudades cuentan ya con muchos autobuses que se alimentan de gas natural… ¿Cuáles son los siguientes pasos?

En efecto, nuestra compañía lleva más de una década comercializando este servicio y cuenta con grandes clientes como TMB (Autobuses Urbanos de Barcelona), TUSSAM (Autobuses Urbanos de Sevilla), EMT Madrid o EMT Valencia. El transporte urbano de pasajeros es un sector en el que el uso del gas natural está completamente arraigado. También está muy implantado en las flotas de camiones de recogida de residuos y en las de grandes y medianas empresas. Aunque hasta hace poco uno de los inconvenientes que tenía este combustible era la escasez de estaciones capaz de cubrir la demanda, la red ha crecido y ya permite circular con gas natural sin problemas de repostaje. En concreto, existen 43 estaciones públicas en España, 27 de ellas gestionadas por nuestra compañía. El número de estaciones crece mes a mes a lo largo de todo el país. Uno de los próximos pasos es incrementar el mallado de la red.

Y ahora que ya hay estaciones que suministren gas natural, ¿hay también oferta de vehí- culos en el mercado?

Existe una pequeña, pero creciente, oferta de vehículos que salen de fábrica preparados para consumir gas natural. En España ya es posible comprar vehículos tan habituales como un Seat León, Seat Mii, Skoda Octavia, Fiat Punto, MercedesBenz clase B y E y muchos otros en su versión GNV. Además, es posible convertir un vehículo de gasolina a gas natural en algunos de los muchos talleres especializados en adaptar el coche al nuevo combustible.

Conocemos las ventajas respecto al vehículo a gasolina, pero ¿y frente al vehículo eléctrico?

El coche eléctrico desempeñará, sin duda, un papel muy importante en el futuro de la movilidad. El gas natural puede hacerlo ya mismo, puesto que la tecnología está suficientemente madura y los vehículos no tienen problemas de autonomía, como sí ocurre en el caso del coche eléctrico. Además, el gas natural puede ser utilizado en vehículos pesados, como es el caso de los camiones o en la movilidad marítima.

Se reducen costes, se mejoran las emisiones, pero ¿pierden potencia los vehículos?

No, las prestaciones de un vehículo que funciona con gas y otro que lo hace con uno de los combustibles convencionales son idénticas.

¿Cómo se han tomado las petroleras esta posible “amenaza”?; ¿es posible la convivencia o suistituirá el GNV a la gasolina?

El gas natural es un combustible que, en la actualidad, está muy ligado a flotas de vehículos, bien sea de transporte de pasajeros o de mercancías. Creemos que puede convertirse en un combustible profesional por todas las ventajas econó- micas y medioambientales que posee. Es un combustible complementario a los que ya existen en el mercado que, desde el punto de vista de país, ayuda a diversificar las fuentes de suministro e introduce competencia.

¿Cuánto cuesta adaptar un coche de gasolina al gas natural vehicular?

Depende del vehículo. Desde los 2000 euros de un turismo de gasolina a los 14000 euros un camión diesel. Los plazos de amortización de la transformación también dependen del kilometraje, desde tres meses en el caso de un taxi al año para un usuario particular.

Revisiones y mantenimiento del coche, ¿son más caras?

Los talleres que realizan las transformaciones pueden, de igual manera, realizar la revisión integral de todo el vehículo, no solo la parte de gas natural a un precio muy competitivo con respecto a los talleres de las marcas. En el caso de los vehículos de serie no hay diferencias apreciables con los de gasolina en los intervalos y coste de mantenimiento que especifica el fabricante en su red oficial.

Algunos expertos afirman que se reduce la capacidad de carga del vehículo, especialmente en turismos ¿se está trabajando para solventarlo?

Es correcto sobre todo cuando se trata de turismos transformados en donde el depósito suplementario ocupa parte del espacio del maletero, el vehículo aumenta su autonomía entorno un 50 por ciento pero el peaje a pagar es un menor espacio para la carga. Con los vehículos de serie este problema no existe pues el fabricante ya lo tiene en cuenta en el diseño.